Vladímir Putin y Donald Trump manifestaron su optimismo tras el encuentro que mantuvieron al margen de la cumbre del G20 en la ciudad de Hamburgo. Cada uno lo expresó a su manera.
"En cuanto a las relaciones personales, yo considero que ya están entabladas. No sé cómo va a sonar lo que le voy a decir: el Trump televisivo difiere mucho de cómo es él en la vida real", dijo Putin en una conferencia de prensa durante la cumbre.
El entusiasmo fue tal, que una reunión que en un principio tendría una extensión prevista de una media hora, alcanzó casi las dos horas y media. El analista militar Gustavo Morales Delgado explica que “de hecho Tillerson expresó que intentaron varias veces interrumpir la reunión, incluso enviaron a la primera dama para decir que había gente esperando”.
"Creo que este primer encuentro entre los dos presidentes es la cosa más reseñable de una cumbre (la del G20), que no ha tenido más resultado que la claridad sobre un próximo enfrentamiento comercial entre la UE y EEUU. EEUU ha reaccionado rápidamente y ha vuelto a reafirmar sus alianzas con el Reino Unido para intentar salvar al Brexit de la ruina económica", reseña el periodista.
Morales Delgado hace una evaluación sobre los pactos a los que llegaron ambos mandatarios en la reunión. "Se llegó a un acuerdo sobre Siria, aunque no tiene excesiva importancia dado que el ISIS (Daesh) ha pasado a ser un problema menor, y las zonas sobre las que han llegado a un acuerdo son donde apenas hay actividad de los grupos yihadistas".
El también asesor conflictos internacionales pone en valor que "lo que sí está claro es que hay una simpatía entre ambos jefes de Estado, y eso puede llevarnos a una nueva época que nos aleje de una vez por todas de esa Guerra Fría en la que nos pretenden mantener los neocon del Partido Republicano (de EEUU) y los Demócratas de Hillary Clinton".
"El señor Tillerson posee la Orden de la Amistad — una distinción que se otorga en Rusia a las personalidades extranjeras cuyas acciones han contribuido a la mejora de las relaciones con el país eslavo —, lo respetamos y lo queremos. Sin embargo, no es ciudadano sirio. El porvenir de Siria y el del presidente Bashar Asad como político deben ser determinados por el pueblo sirio", sentenció Putin.
Morales Delgado está de acuerdo con las palabras de Putin. "Evidentemente, porque las políticas que está manteniendo EEUU, sigue siendo la política tradicional de EEUU hacia Siria (…) donde está presente sin que nadie lo haya invitado. Rusia e Irán han sido invitados por el pueblo sirio a través de su Gobierno, y el propio grupo libanés Hezbolá, pero en ningún caso EEUU ha sido invitado".
"EEUU está allí como alguien que se ha presentado a una cena sin haber sido invitado. Está de sobra, está de más. La presencia de EEUU en Irak tiene una legitimidad, tanto que el Gobierno iraquí así lo ha permitido, pero en ningún caso la tiene en Siria, y mucho menos después de (…) haber derribado un avión sirio en cielo sirio y en territorio sirio, y (…) un dron iraní que realizaba funciones de información contra los grupos terroristas", apunta el experto.
"Donald Trump es un hombre imprevisible en el sentido de que no es un político al uso, no tiene una experiencia previa como muchos de los políticos norteamericanos que antes (de ser presidentes) han sido senadores, o gobernadores de alguno de los Estados. Por eso precisamente ahí está la frescura en sus opiniones y su falta de prejuicios en las relaciones con Rusia", concluye Gustavo Morales Delgado.