Al asegurar la liberación de la antigua ciudad, Rusia salió vencedora, reza el artículo. Esta victoria "desenmascara la debilidad de EEUU y de sus aliados franceses" que no figuran entre los libertadores. La lección de la estrategia de Putin es fácil de adivinar: solo la fuerza hará que la ideología islamista se retire, ya que ella respeta solo este tipo de idioma, asegura el periodista francés.
El 27 de marzo, el Ejército sirio y las fuerzas de defensa popular anunciaron la liberación completa de la antigua ciudad de Palmira —uno de los seis lugares de Siria declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco— y las zonas circundantes de importancia estratégica, de los terroristas de Daesh, con la ayuda de las fuerzas aéreas sirias y rusas.
Desde mediados de mayo de 2015, la antigua ciudad permaneció en manos del autoproclamado Estado Islámico.