México ha convocado a las empresas petroleras nacionales y extranjeras a concursar por una decena de sus codiciados reservorios de hidrocarburos en el Golfo de México, informó este miércoles la Secretaría de Energía.
Se trata de la cuarta fase de la llamada Ronda Uno –integrada por cinco convocatorias- de la histórica apertura del décimo productor mundial de crudo a la inversión privada, luego de 77 años de monopolio estatal, y el proceso duraría nueve meses, para culminar en el tercer trimestre de 2016, de acuerdo con el anuncio oficial.
La cartera de Energía del Gobierno de Enrique Peña determinó excluir de esta cuarta convocatoria otra decena de campos muy prometedores de crudos extra-pesados en sus aguas someras del sur del Golfo de México, que habían sido contemplados en el plan original, e incluir para esta fase únicamente áreas en aguas profundas del Golfo de México, con tirantes de agua de 500 a 2.500 metros de profundidad en altamar.
El valor estimado de cada uno de los campos de las aguas profundas, es de 3.000 a 4.000 millones de dólares, dijo en una entrevista reciente con Sputnik Nóvosti el presidente de la Comisión Nacional de hidrocarburos (CNH, regulador estatal), Juan Carlos Zepeda.
La tercera fase de la Ronda Uno se ha cumplido el martes de esta semana con un éxito total, al adjudicarse los 25 pequeños contratos en campos terrestres maduros con alrededor de 100 millones de barriles remanentes en cada uno, para los cuales se estima una inversión de 750 millones de dólares en cinco años dijo a periodistas el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell.
Tras el exitoso 100 por ciento de contratación el martes, animado por el surgimiento de decenas de empresas mexicanas fundadas por antiguos contratistas de la estatal Pemex y magnates de otras industrias, Coldwell ha anunciado con entusiasmo el envío a la CNH de los modelos de contrato y bases de licitación de los campo petroleros bajo las aguas profundas del Golfo, cuya riqueza fue estimada primera vez durante el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012).
El gobierno estableció el modelo de contratación de licencia “por su idoneidad para este tipo de proyectos, así como para la maximización de los ingresos de la Nación”, dijo el secretario de Energía.
Los precios del crudo mexicano llegaron a su nivel más bajo en 11 años el viernes pasado, y el martes cerró a 28,34 dólares por barril (similar a su peor marca en 2008), con una pérdida de alrededor de 20 por ciento en un mes.
Por ello “dadas las circunstancias de volatilidad del mercado petrolero internacional, la presentación de propuestas y adjudicación se anunciará a más tardar durante el tercer trimestre de 2016 y el acto se calendarizará al menos en 90 días posteriores a su anuncio”.
Las pocas compañías poderosas de la industria petrolera que poseen la tecnología de punta para esas grandes profundidades, las llamadas “majors”, como ExxonMobil, BP, Shell o Statoil, ansían concursar por recursos mexicanos en aguas profundas.
Para esta cuarta fase de la Ronda Uno, México espera a "las petroleras de gran escala y donde vienen las grandes inversiones", además de la quinta licitación, dijo Coldwell.
Para cerrar la Ronda Uno que abrió la industria mexicana tras la nacionalización de 1938, “iniciaremos la preparación de la quinta licitación", la cual se estima sea publicada antes de que termine el mes de marzo de 2016, además de que “esa quinta subasta podría llevarse a cabo antes de la cuarta”.
La quinta y última litación incluye el reservorio terrestre de Chicotepec, y 60 campos en rocas de esquisto en el norte de México, en la frontera con Texas, que requerirían la costosa tecnología de la fractura hidráulica desarrollada en EEUU.