El repliegue del armamento pesado, así como el armisticio general, son
unos de los requisitos clave para el arreglo de la crisis ucraniana,
acordados en Minsk el pasado 12 de febrero por el Grupo de Contacto
(OSCE, Ucrania y Rusia) y los líderes de Alemania, Francia, Rusia y
Ucrania.