El anuncio del equipo de Harris de que la aspirante demócrata a la presidencia y actual vice del Gobierno de Joe Biden sobrepasó los 1.000 millones de dólares en donaciones en menos de 3 meses de campaña se vio ensombrecido por recientes sondeos que la muestran perdiendo terreno en varios estados de gran importancia electoral, conocidos como 'swing states', claves para sus ambiciones de triunfar en las elecciones generales del 5 de noviembre.
En el trabajo realizado por la Universidad Quinnipiac, dado a conocer el pasado miércoles 9 de octubre, Kamala Harris está por detrás de Trump en Michigan, con el expresidente y candidato republicano exhibiendo un 50% en intención de voto y un 47% para la abanderada demócrata.
En un mismo sentido, el magnate aventaja a la actual vicepresidenta en el estado de Winconsin por un estrecho margen, con Trump obteniendo un 48% de las preferencias y Harris el 46%.
Ambas contiendas dan cuenta de un retroceso en intención de voto para Harris, quien apenas hace un mes tenía una ventaja de 5 puntos en Michigan (50 a 45) y de un punto en Wisconsin.
Según el mismo sondeo, Harris sí mantiene su ventaja sobre Trump en Pensilvania, consiguiendo el 49% de intención de voto, 3 puntos menos que el republicano, que obtiene 46%. La candidata demócrata vio su ventaja mermada en apenas 30 días, ya que el sondeo previo en el mismo estado la tenía liderando las preferencias 51 a 46.
Triunfar en estos 3 estados, como lo hizo el entonces candidato Biden en 2020, es esencial para las aspiraciones de Harris de poder llegar a los 370 votos del Colegio Electoral y así llegar a la presidencia.
En caso de perder uno de los 3 estados que conforman el llamado "muro azul", por la histórica inclinación de sus electorados en votar por los candidatos demócrata, Harris deberá imponerse en alguno de los territorios en los que suelen vencer los aspirantes republicanos, algo que según los sondeos se antoja difícil.
La debilidad de Harris en las últimas encuestas ha disparado una gran preocupación entre dirigentes demócratas y miembros de su equipo de campaña, quienes luego de decidir que la candidata evadiera a la prensa durante los casi 3 meses que lleva de candidata presidencial, determinaron que tanto la vice como su compañero de fórmula, Tim Walz, aparezcan en casi de una docena de medios esta semana, con la intención de revivir sus oportunidades electorales.
Además, la campaña de Harris, que ha sido cuestionada por adoptar una plataforma conservadora en las últimas semanas en temas como el conflicto en Medio Oriente y la inmigración, ha decidido aumentar la cantidad de mítines en Michigan y Pensilvania en la última semana, enviando allí a una serie de voceros para hablar con la prensa y votantes, entre ellos el exjugador de básquet "Magic" Johnson, el exrepresentante James Clyburn y hasta el propio expresidente Barack Obama.
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