"Usan el mismo guion, primero fue Siria, después Skripal y ahora lo prueban en el caso Navalni", dijo Nebenzia a Sputnik sin mencionar a los que estarían detrás de todas esas tramas.
El embajador subrayó que todo esto está plagado de inconsistencias y de hechos ficticios de los que "nadie quiere hablar".
"Se ha emitido ya un veredicto pero nadie busca las pruebas, en particular en el caso sirio", indicó.
El embajador remarcó que esos organismos son fábricas para producir informes.
En abril de 2020, el IIT emitió un informe en el que aseguró que la Fuerza Aérea siria usó en 2017 armas químicas. Lo cierto es que Estados Unidos y otros siete países destruyeron por completo el arsenal tóxico sirio en agosto de 2014 en una operación coordinada por la ONU. Además los expertos del IIT nunca estuvieron en Siria para recoger evidencias.
En 2018, el Gobierno británico de la entonces primera ministra Theresa May acusó sin pruebas a Rusia del supuesto envenenamiento del exespía Serguéi Skripal con una sustancia tóxica altamente letal en una ciudad situada a unos 100 kilómetros al suroeste de Londres. May se negó a realizar una investigación conjunta con los expertos rusos para establecer lo que realmente sucedió.
Siria, blanco de países de Occidente
Además, Vasili Nebenzia dijo que los países de Occidente utilizan la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) contra Rusia, en particular en el caso Navalni, aunque su blanco principal son las autoridades de Siria.
"Ciertos países occidentales miembros de la OPAQ y su secretaría —que está en el bolsillo de esos Estados, francamente dicho— usan el prestigio de esta organización para poner en la picota a las naciones que no les gustan. Su blanco clave en la etapa actual es Siria, a la que presentan como el primer sospechoso, pero de la misma manera nos empiezan a tratar también a nosotros. Por eso decimos que se debe hacer algo para que la OPAQ no se degrade", señaló.
"Si la OPAQ pierde definitivamente el prestigio y se convierte en un lugar donde se estampan mecánicamente unas decisiones contra los regímenes indeseables, se podrá pensar en abandonarla", dijo, y al mismo tiempo señaló que Rusia está en contra de dar unos pasos bruscos y no lo recomienda hacer a nadie.
Como el más vivo ejemplo de actitud preconcebida, Nebenzia recordó las acusaciones del uso del arma química formuladas contra Siria, las que Damasco y Moscú califican de infundadas.
En un informe de la OPAQ estaban borradas minuciosamente todas las fórmulas químicas de las sustancias que unos laboratorios occidentales "descubrieron", supuestamente, en los análisis realizados a Alexéi Navalni y las que podrían ayudar a aclarar la naturaleza bioquímica del "envenenamiento" de ese opositor ruso.
El diplomático subrayó que Rusia no le resta importancia a la OPAQ, pero sostiene que se debe distinguir entra la propia organización y su secretaría técnica.
"No decimos que la OPAQ no haga falta o no tenga importancia, es en principio un importantísimo instrumento de prevención de la fabricación y el uso del arma química, que hizo mucho en este dominio granjeándose un Premio Nobel", señaló.
Investigación del caso Navalni
Asimismo, Vasili Nebenzia dijo que Rusia está debatiendo con la OPAQ un memorando sobre la labor en su territorio de una misión de ese organismo que investigará lo sucedido con Alexéi Navalni.
"Hemos invitado a la misión de la OPAQ a que visite Rusia, de acuerdo con uno de los artículos de la convención sobre la prohibición de las armas químicas. Ahora se está acordando un memorando sobre las condiciones de su arribo y el contenido de su labor ", dijo el diplomático.
"Si mañana se llega a firmar el memorando, será pronto", precisó el embajador de Rusia ante la ONU.
El pasado 6 de noviembre el Ministerio de Exteriores de Rusia denunció que en el informe difundido por la OPAQ sobre el caso están borradas minuciosamente todas las fórmulas químicas de las sustancias que los laboratorios occidentales "descubrieron" supuestamente en los análisis realizados a Navalni, que podrían ayudar a aclarar lo ocurrido con el bloguero.
Nebenzia catalogó ese secretismo de "muy extraño" y precisó que se trata de un veneno que no aparece en la lista de los tóxicos similares a Novichok de la lista de la convención contra la propagación de armas químicas.
"Los alemanes nos dicen que no quieren darnos la fórmula porque nos revelarían un terrible secreto", subrayó Nebenzia.
El diplomático recordó que recientemente la Fiscalía General rusa envió a Alemania una quinta solicitud de asistencia legal en el marco de la investigación.
"A las cuatro primeras ellos solo respondieron con una nota de que las estaban estudiando", advirtió el representante permanente, quien considera que los alemanes se encuentran en "una situación difícil".
El funcionario resaltó que Navalni se sintió mal cuando se encontraba en el territorio de Rusia, pero los representantes de Berlín no responden a las solicitudes rusas, ni tampoco reaccionan a las preguntas muy precisas que les hace Moscú.
En septiembre de 2020, Alemania afirmó sin pruebas que el bloguero ruso Alexéi Navalni había sido envenenado con un presunto compuesto sumamente mortal. El 20 de agosto, el hombre se sintió mal durante un vuelo de la ciudad de Tomsk a Moscú, lo que obligó a los pilotos a realizar un aterrizaje de emergencia en Omsk. Fue ingresado en el hospital de esa ciudad donde los médicos lograron salvarle la vida. Dos días después era trasladado a una clínica de Berlín. Lo cierto es que ni los pasajeros del avión ni las personas del entorno de Navalni que le acompañaban, presentaron síntomas de envenenamiento con la supuesta toxina mortal. El Gobierno alemán se negó a realizar una investigación conjunta con Rusia para esclarecer lo que realmente ocurrió.