"El acuerdo entre Rusia y Turquía acerca de Libia es una de las cuestiones más importantes de este principio de año", dijo a Sputnik Breno Altman, director del portal de geopolítica Opera Mundi. Principalmente porque por primera vez en años Sarraj y Haftar hablan de paz.
Haftar lidera el Ejército Nacional Libio (ENL), cuenta con el respaldo del Parlamento establecido en la ciudad de Torbuk y controla buena parte del territorio. Por su parte Sarraj está al frente el Gobierno de Acuerdo Nacional (GAN), reconocido por la ONU y que centra su poder la capital Trípoli y otras ciudades.
Por el contrario, Turquía apoya a Trípoli, con la que acaba de cerrar un acuerdo en materia de seguridad marítima y gasífera. Además acordó el envío de tropas para repeler los ataques del ENL.
"Rusia y Turquía apoyan lados distintos en la guerra civil pero han llegado a un acuerdo para cesar el fuego y desarrollar una tentativa de establecer un acuerdo definitivo, lo que representa un nuevo espacio geopolítico para los dos países en detrimento de Francia, Italia y EEUU", dijo Altman.
Esos eran los países que venían liderando hasta la irrupción ruso-turca las negociaciones esporádicas y encuentros internacionales para la búsqueda de soluciones.
El factor sirio
Esta aparición fue posible, indicó Altman, luego de la participación rusa en el combate al terrorismo y la pacificación de Siria.
"El acuerdo dibujado por Turquía y Rusia permite potencialmente que se llegue a un compromiso entre las fuerzas beligerantes de tal forma que se pueda restablecer un estado nacional", opinó Altman.
Si bien el lunes 13 en Moscú las partes dialogaron y Sarraj firmó el acuerdo, Haftar pidió al menos 48 horas para poder discutirlo con los líderes tribales que lo apoyan. Y hasta el momento se mantiene el cese al fuego que había sido establecido en el marco de las gestiones ruso-turcas.
El eje Moscú-Berlín
Todo indica que se mantendrá al menos hasta la conferencia en Berlín. Así lo transmitió el canciller alemán, Milko Maas, tras un viaje a Libia para una reunión con el mandato del ENL.
"Durante mi visita de hoy (jueves) en Libia, el general Haftar dejó en claro que quiere contribuir al éxito de la conferencia libia en Berlín. En principio está dispuesto a participar en ella. También accedió a respetar el alto el fuego en curso", tuiteó Maas.
El martes 14 la canciller Angela Merkel mantuvo una conversación telefónica con el presidente ruso, Vladímir Putin. Al concluir, el Kremlin difundió un comunicado.
"Fueron discutidos los preparativos para la conferencia internacional en Berlín sobre la solución de la crisis en Libia; Vladímir Putin también informó a Angela Merkel sobre la reunión —de los ministros de Exteriores y de Defensa de Rusia y Turquía— con los líderes de los bandos del conflicto libio celebrada en Moscú", destaca el texto.
Historia reciente
Rusia y China se abstuvieron en la votación del Consejo de Seguridad, habilitado por la vía de los hechos las acciones militares al no usar el derecho a veto que tienen como los otros dos miembros permanentes del Consejo.
Ambas potencias eran acusadas de apoyar a un Gobierno dictatorial y violador de los derechos humanos, mientras que sus socios en el Consejo aseguraban que tras la caída de Gadafi la situación volvería la normalidad. El líder histórico del país norteafricano fue asesinado el 20 de octubre de 2011.