"En la reunión de la Comisión Conjunta sobre el PAIC en junio fueron definidos claramente los desafíos primordiales y para eliminarlos, los países participantes deben trabajar mucho", dijo el organismo diplomático ruso al indicar que "no se puede dejarse llevar por las emociones".
También señaló que las declaraciones que hicieron los representantes de la Cancillería y la Organización de Energía Atómica de Irán sobre su firme intención de dar el próximo paso en el rechazo a sus compromisos en el marco del PAIC no deben provocar revuelo.
"Se trata exclusivamente de los compromisos voluntarios que Irán asumió para llegar a un acuerdo y sellar el PAIC, mientras las condiciones del pacto se violaron brutalmente desde hace mucho tiempo y como todos nosotros lo sabemos, no fue Irán quien lo hizo", apuntaron los diplomáticos rusos.
La Cancillería rusa también subrayó que "los representantes iraníes no hicieron declaraciones algunas sobre la suspensión o revisión del proyecto para la modernización del reactor de investigación en Arak".
"Todos los trabajos en este tramo se realizan según los previsto", dijo al agregar que "las partes interesadas lograron intensificar la implementación del proyecto pese a la objeción y las sanciones de EEUU".
Los diplomáticos subrayaron que "los mismos pasos decisivos son necesarios en otros ámbitos".
Este 8 de julio el portavoz de la Organización de Energía Atómica de Irán, Behruz Kamalvandí, anunció que el nivel de enriquecimiento de uranio en el país persa ya superó el 4,5%, por encima del límite del 3,67% establecido en el PAIC.
En mayo de 2018, Estados Unidos rompió el acuerdo nuclear que habían sellado el Grupo 5+1 (China, Francia, Estados Unidos, Reino Unido, Rusia más Alemania) y Teherán en 2015 y restableció sus sanciones unilaterales.
El 8 de mayo de 2019, a un año de la retirada de Estados Unidos del pacto nuclear, Teherán anunció que superaría el nivel de 300 kilogramos de uranio enriquecido que le permite almacenar el PAIC, objetivo cumplido en junio y confirmado a inicios de julio por la Organización de Energía Nuclear de Irán.
El 7 de julio, Irán, al cumplirse 60 días de plazo que había dado a los países signatarios del Plan de Acción Integral Conjunto, activó la segunda fase de sus medidas ante la falta de avances.