1. Altos niveles de deuda pública
La deuda pública de México no ha parado de crecer. Según cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, en 2017 el Gobierno de Enrique Peña Nieto registró un endeudamiento del 46,3% del Producto Interno Bruto (PIB) equivalente a 10 billones de pesos mexicanos (531.000 millones de dólares)
Dentro de la deuda pública hay un sector importante, que representa el no pago de las pensiones de extrabajadores estatales de empresas como Pemex, la Comisión Federal de Electricidad, los del Seguro Social e incluso de Mexicana, la fundida empresa aeronáutica de bandera.
2. Pérdida del control sobre el petróleo y otras áreas estratégicas
Con la Reforma Energética, la pérdida del monopolio estatal en la extracción de petróleo mexicano cerró una de las principales fuentes de financiamiento del Gobierno. Según datos del Instituto de Estadística y Geografía Mexicano (Inegi), en 2006 llegó a representar el 37% de los ingresos del sector público. Pemex generaba entonces el 10% del PIB del país.
Esta fue una de las "reformas estructurales" promovidas por Enrique Peña Nieto. Durante su Gobierno de seis años (2012-2018), fueron modificados 127 artículos de la Constitución —sin contar los casos en que modificados más de una vez—, lo que cambió radicalmente la cara a casi todos los sistemas prioritarios: la justicia y su aplicación, la política fiscal, energética, laboral, de telecomunicaciones, educativa y de transparencia. Sus consecuencias apenas empiezan a aparecer.
3. Altos niveles de pobreza
Siete de cada 10 mexicanos viven hoy en la pobreza, según las cifras del Inegi. Según el Centro de Análisis Multidisciplinarios de la Facultad de Economía de la UNAM, los trabajadores mexicanos perdieron un 80% de su poder adquisitivo en los últimos 30 años.
En su estudio explicaron que, en 1987, a un trabajador "le restaban 19 horas y siete minutos para transportarse, comer, asearse, convivir con su familia, salir a pasear y dormir, entre otras actividades. Para octubre de 2017, el tiempo necesario de trabajo para comprar la canasta básica ha sobrepasado un día completo", publicaron.
4. Crisis de violencia
El país está sumido en una crisis de muerte y sangre. En 2017 se registraron 31.174 asesinatos, que representan un promedio nacional de 25 cada 100.000 habitantes: un aumento del doble con respecto a la del año 2014, y es la mayor registrada en los últimos 60 años.
Además, hay 37.435 personas desaparecidas en México, según las últimas cifras publicadas por el Registro Nacional de Personas Extraviadas o Desaparecidas, hasta el fin de abril de 2018.
5. Escaso acceso a la seguridad social
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política Pública informó que la mitad de los mexicanos vive sin acceso a la seguridad social.
El malo o nulo acceso a la atención en salud se refleja en los altos índices de mortandad causada por enfermedades crónicas como la diabetes mellitus, que acabará con la vida de 100.000 mexicanos al final del 2018.