"Hemos atravesado complicadas transformaciones a gran escala, hemos hecho frente a desafíos económicos y sociales absolutamente nuevos y muy difíciles, y hemos preservado la integridad del país", dijo Putin.
El presidente agregó que Rusia logró garantizar "la estabilidad en casi todos los ámbitos de la vida".
"Sin embargo, la estabilidad es el fundamento, pero no es la garantía de un desarrollo ulterior, no tenemos derecho a que la estabilidad lograda conduzca a la complacencia, sobre todo por que muchos problemas están lejos de ser resueltos", subrayó Putin.
Asimismo, el presidente ruso declaró que Rusia no ha alcanzado el nivel de bienestar adecuado pero lo alcanzará, para lo cual es necesario dar un salto cualitativo.
El mandatario ruso se mostró convencido que se acabará dando "un avance decisivo" en ese ámbito.
"El papel, la posición del Estado en el mundo contemporáneo se define no tanto por los recursos naturales, las capacidades de producción (…) como por la gente, las condiciones para el desarrollo, la realización individual, la creatividad de cada persona", explicó el presidente.
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Según Putin, "es por ello que la base de todo radica en (…) el bienestar de nuestros ciudadanos".
La estructura del empleo en Rusia es arcaica y debe modificarse, declaró el presidente del país.
"Necesitamos modificar a fondo la estructura del empleo, que hoy en día es ineficaz y arcaica, proporcionar a la gente un buen trabajo que motiva, brinda prosperidad, permite realizarse, crear empleos modernos y decentemente remunerados", dijo Putin.
Rusia debe reorganizar el sistema de asistencia social para apoyar a las familias que realmente lo necesitan, añadió el mandatario.
"Necesitamos construir todo el sistema de asistencia social sobre principios de equidad, hablamos mucho sobre ello pero al fin y al cabo debemos realizarlo, la asistencia la deben recibir aquellos que realmente la necesiten", afirmó.
Además recordó que 42 millones de personas o el 29% de la población del país vivían en el año 2000 por debajo del nivel de subsistencia.
Para 2012, Rusia logró reducir ese nivel al 10%.
"Debido a la crisis económica, la pobreza volvió a crecer, hoy la enfrentan 20 millones de ciudadanos, por supuesto, no son 42 millones, como fue en 2000, pero también es inaceptablemente alto", recalcó.
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Advirtió también que los problemas demográficos podrían limitar el crecimiento económico de Rusia.
En este contexto, Putin abogó por garantizar un crecimiento natural de la población del país.
"Se debe responder a estos desafíos [demográficos] y en los próximos diez años garantizar un crecimiento natural estable de la población de Rusia", dijo.
"Es un 40 más que en los seis años anteriores, entre 2012 y 2017 asignamos para este fin 2,47 billones de rublos", detalló.
El presidente, además, apuntó a la importancia de lograr que la esperanza de vida en Rusia aumente a más de 80 años para la próxima década.
"Hoy tenemos que fijar una meta de nuevo nivel, que es lograr para finales de la próxima década que Rusia entre en el club de países 80+, como Japón, Francia, Alemania, en los que la esperanza de vida supera los 80 años", dijo.
Putin notó que en los últimos años la dinámica del crecimiento de la esperanza de vida en Rusia se hizo una de las más altas a nivel mundial.
"En los años 2019-2024 todas las fuentes deberán destinar un promedio de más del 4% del PIB para el desarrollo del sistema de sanidad, pero, por supuesto, hay que aspirar a un 5%", dijo Putin.
Agregó que de este modo los gastos totales en sanidad deben duplicarse.
Al mismo tiempo, Putin destacó que es necesario encontrar oportunidades adicionales de financiamiento que no frenen el crecimiento económico.
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Además, el presidente subrayó que la tarea más importante que concierne a todos es asegurar el acceso a la asistencia médica moderna de alta calidad.
Además, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ve necesario aumentar el PIB per cápita en el país en un 50% en la próxima década.
"Rusia debe no solo afianzar posiciones entre las cinco mayores economías del mundo, sino aumentar a mediados de la próxima década el PIB per cápita en un 50%", agregó.
Conforme a la Constitución rusa, el presidente realiza una vez al año un discurso ante los diputados en el que hace balance de la situación del país y traza las principales directrices de la política interna y exterior.
Es un documento político-jurídico que refleja la visión de los derroteros estratégicos del desarrollo de Rusia a corto plazo, incluye tanto postulados políticos, económicos e ideológicos como propuestas concretas sobre la actividad legislativa de ambas cámaras del Parlamento.