"Ha muerto otro palestino, ya el segundo, en la Franja de Gaza, y otros tres se encuentran en estado grave", dijo el portavoz del Ministerio de Sanidad local, Ashraf Al Kidra.
A su vez, la portavoz de la Cruz Roja, Irab Al Fukaha, comunicó que más de 760 personas sufrieron heridas en las manifestaciones de protesta.
La primera víctima es Mahmud Masri, de 30 años, quien falleció "por disparos de los soldados" al este de la localidad de Jan Yunis, al sur de la Franja.
Los militares israelíes calcularon que en las protestas en Cisjordania y en las fronteras de la Franja de Gaza participaron unas 7.500 personas y reconocieron haber disparado contra "decenas de instigadores".
El balance de heridos, que todavía no es definitivo, supera los 760, de los que 60 han tenido que ser ingresados en hospitales.
La mayoría de los palestinos contabilizados como heridos inhalaron el humo de las granadas usadas por los soldados para dispersarlos.
Sin embargo, decenas de heridos fueron alcanzados por balas de goma, y en algún caso por fuego real.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el 6 de diciembre la decisión de reconocer Jerusalén como capital de Israel y reubicar allí su Embajada.
El Congreso de EEUU había aprobado el traslado de la embajada de Tel Aviv a Jerusalén en 1995, pero desde entonces la Casa Blanca fue decretando prórrogas de dicha ley por tratarse de un tema extremadamente sensible para el mundo árabe y los adeptos del islam.
La decisión de Trump fue condenada por la mayoría de los países musulmanes y generó críticas de otros Estados e instituciones internacionales que consideran menos viable ahora cualquier perspectiva de paz en Oriente Medio.
Israel considera que Jerusalén, incluidos los barrios orientales que reclaman los palestinos, es su capital "única e indivisible".
Por el momento, todas las embajadas extranjeras se encuentran en la ciudad de Tel Aviv, para evitar tomar parte en la disputa entre israelíes y palestinos.