El Voronezh-DM pertenece a la clase de radares sobre el horizonte que funcionan en el rango de longitud de onda decímetro. Es capaz de detectar objetivos balísticos, espaciales y aerodinámicos a una distancia de hasta 6.000 kilómetros sobre el horizonte y hasta 8.000 kilómetros verticales para cubrir el espacio cercano. Asimismo, el radar puede rastrear simultáneamente hasta 500 objetos.
Los radares de la clase Voronezh pertenecen a la última generación de sistemas de alerta temprana terrestres. Actualmente, en Rusia operan cuatro radares de este tipo y se prevé que otros tres pasarán las pruebas antes del final de este año. Varios expertos coinciden en que el Ejército ruso logró superar el nivel de desarrollo de las herramientas de alerta temprana soviéticas y establecer un control total sobre todas las direcciones de potencial amenaza de misiles.
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Según el especialista, la información de los Voronezh se transfiere inmediatamente al puesto de mando. Allí, se analizan y se procesan los datos para luego enviarlos al Comando Supremo del país, el cual decide qué hacer a continuación. Si se detecta un lanzamiento masivo, es muy probable que se decida realizar un ataque de respuesta. Todo este proceso tarda unos minutos, agregó.
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 5 июня 2017 г.
Asimismo, los radares de alerta temprana son esenciales para identificar la basura espacial. Jodarénok subrayó que actualmente la órbita está llena de cientos de objetos potencialmente peligrosos: etapas de cohetes, satélites 'muertos' y todo tipo de restos.
Los operadores de radar registran cuidadosamente esta basura espacial para poder distinguir los residuos ordinarios de una unidad de combate de misil balístico que entra en la atmósfera, en caso de que sea necesario. Hasta la fecha, solo Rusia y EEUU son capaces de realizar este tipo de trabajo.