Sin embargo, destacó Gilmore ante el Pentágono, "la idoneidad operativa de todas las variantes del F-35 sigue siendo inferior a lo deseado". Asimismo, planteó varias dudas acerca de la capacidad de la aeronave de tener éxito en operaciones aire-aire y aire-tierra, de proporcionar apoyo aéreo cercano y de operar desde portaviones.
"El F-35 necesitará soporte para localizar y evitar la amenaza de los radares terrestres, alcanzar objetivos y participar en formaciones de aviones de combate debido a las deficiencias de desempeño no resueltas y la capacidad limitada de carga de armas", detalló Gilmore.
El F-35 debería ser un avión polivalente que podría asumir varios papeles. No obstante, las noticias no son alentadoras, expresa Grazier.
Ineficaz como caza
Asimismo, profundiza Grazier, su capacidad de combate se ve extremadamente limitada debido a que solo puede portar dos misiles de medio alcance aire-aire guiados por radar, AMRAAM. En el futuro podrá emplear tan solo cuatro misiles con el fin de preservar su capacidad furtiva.
Ineficaz como bombardero
Incluso los sistemas para derrotar aviones furtivos —PDS, o sistemas de detección pasiva- más obsoletos pueden fácilmente detectar al F-35. Cualquier avión "es susceptible a los radares instalados en los PDS".
"La principal arma aire-aire del F-35 es su misil de radar más allá del alcance visual. Como resultado, tiene que usar un gran radar que transmite señales de alta potencia para detectar blancos aéreos y luego guiar el misil", explica.
Además, el pequeño número de armas que puede portar también limita su flexibilidad en combate. Así, el actual software solo permite tener una bomba operacional a bordo del F-35, la cual solo podría ser útil cuando se trata de atacar uno o dos objetivos terrestres similares.
Ineficaz como plataforma de apoyo aéreo cercano
"Ninguno de los tres modelos del F-35 puede usar cañones de combate. De hecho, ningunos de ellos está lo suficientemente cerca de completar sus vuelos de prueba de la fase de desarrollo —mucho menos las pruebas de idoneidad operacional- para la seguridad, precisión y letalidad de objetivos", apunta el periodista.
Asimismo, debido a sus alas pequeñas y sobrecargadas, el F-35 no es capaz de maniobrar adecuadamente a bajas velocidades, lo cual es necesario para buscar los objetivos ocultos. De esta manera, completamente desarmado y altamente inflamable, el caza sufriría pérdidas catastróficas causadas por pequeños golpes de rifles o ametralladoras.
Sin embargo, en los vuelos de prueba las redes de datos digitales del F-35 "han experimentado dificultades significativas, incluida la transmisión en formato erróneo de mensajes y datos". Este problema ha obligado a los pilotos y a los controladores terrestres a repetir la información por voz a través de la radio.
"En un combate real cuando cada segundo cuenta, es un peligroso retraso que los pilotos no pueden permitirse", subraya.
Ineficaz en operaciones desde portaviones
Según indican los pilotos de la Marina de EEUU, la versión F-35C, construida para la Armada, tampoco funciona con los barcos.
Además, la pantalla montada en el casco que se utiliza por pilotos del F-35 tiene un peso de 2.3 kilógramos, lo cual, combinado con las fuerzas generadas durante los lanzamientos desde catapultas, provoca severos dolores de cabeza y cuello a los pilotos.
De esta manera, el F-35 se ha convertido en un "desastre nacional" y las autoridades del país deberían continuar revisando el programa, expresa Glazier.
"Hay muchas razones para creer que este programa seguirá consumiendo nuestros recursos y acabaremos con un avión mediocre", concluye.