Este carnaval "es considerado uno de los más grandes de América Latina, por la participación de un millón de personas en los días de fiesta y vacaciones", que se prolonga del 22 al 28 de febrero, dijo la portavoz de los organizadores.
El tambor de los costeños es el rey del ritmo veracruzano, donde predominan el danzón, la rumba, y los sones "jarochos", para zapateados acompañados de arpas y guitarras tropicales, como el llamado cuatro.
"La algarabía típica del jarocho —palabra originada en los lanceros negros que se organizaron en la época colonial— tiene una manera particular de expresarse, es distinta a otras regiones de México, por las expresiones coloquiales, dicharacheras, con personajes únicos de su cultura popular", dijo la experta.
La característica costeña de esa cultura, hace que cientos de miles se desborden por las calles "con su identidad singular, con el temperamento alegre, sin importar las situaciones adversas, como algo muy característico y reconocido del temperamento veracruzano en este país".
Sin embargo, este año, "han llovido sugerencias de la ciudadanía para que el centro del escarnio popular, como 'figura del mal humor' sea Donald Trump y su muro fronterizo, antes que el exgobernador prófugo (Javier Duarte) o la inseguridad, que en estos días olvidamos", dijo Tapia.
Cuba país invitado
La música afrocaribeña veracruzana, fusionada con ritmos de la zona, contará esta vez con invitados de la isla caribeña que ha enviado a decenas de artistas a Veracruz, cuna de luminarias nativas como Agustín Lara (1807-1970).
"Será una sorpresa el desfile de un carro alegórico y una comparsa cubana, del Centro Cultural Timbalaye, corazón de la Ruta de la Rumba 2017 en Cuba", dijo la portavoz del evento anual.
El vínculo principal para acortar los 1.500 km que separan a La Habana del Puerto de Jarocho es la música con el Caribe, que se ha integrado en Veracruz, el proyecto Xal-Habana, la fusión entre Xalapa y La Habana, que no se limita a la música y los bailes, sino a platillos muy similares como los moros con cristianos, o la carne de puerco.
El primer comité organizador que cada año se modifica, "se remonta oficialmente a 1925 y todo el mundo recuerda como símbolo de la belleza de la época a Lucha Raigadas", recuerda Tapia.

Con esa historia, se presenta este carnaval como uno de los más antiguos en América Latina: "Comenzó en el siglo XVII, cuando se realizaban bailes, y en el siglo XIX se convirtió en fiesta de máscaras, en los mejores salones de la ciudad, que después salieron a las calles para seguir el festejo, antes de la Cuaresma".
La inversión de este año, marcado por la austeridad, será de 50 millones de pesos (unos 2,5 millones de dólares) dijo a Sputnik el presidente del Comité del Carnaval de Veracruz 2017, Luis Antonio Pérez Fraga.
A pesar de los tiempos que corren, de inflación, altos precios de las combustibles y encarecimiento del dólar "Veracruz puede presumir de una ocupación hotelera de 90 a 100%", añadió la principal figura responsable.
"El lunes y martes, 27 y 28 de febrero, vamos a echar la casa por la ventana, en esos días, con los mejores desfiles masivos, las graderías serán gratis, no solo del lado mar, sino absolutamente todas, incluyendo el camellón turístico", mientras que los otros días costará unos 4 dólares la entrada, anunció.
El viejo café colonial La Parroquia, las glorias del expresidente Venustiano Carranza de la época de la Revolución Mexicana y las guerras de Independencia, son otros atractivos.
El escenario son tres kilómetros del puerto comercial frente al mar del golfo de México, y en la costera, que los veracruzanos gustan comparar con otras fiestas latinoamericanas
"Es un evento internacional y el segundo más importante de Latinoamérica después del de Río de Janeiro, donde durante una semana hay desfiles, coronaciones, conciertos, fiestas, todo acompañado del buen humor de los jarochos", dice la invitación oficial a la fiesta de nueve días.
Una vez que sea realizada la "quema del mal humor" de Trump, en el primer día del carnaval, seguirá la coronación de la Reina del Carnaval, el Rey de la Alegría y los Reyes Infantiles, antes de que inicie la celebración católica de la Cuaresma.
Los veracruzanos, singulares en México por habla suelta y plagada de doble sentido, para tomar el pelo a los interlocutores, gustan decir que "el carnaval de Veracruz es el más alegre del mundo".