El banco central alemán comunicó haber sacado 111 toneladas de oro de la reserva federal en Nueva York en el 2016. Esta fue la última parte de las 300 toneladas que debía recobrar, informa Bloomberg.
Una vez que las transferencias se hayan completado, Fráncfort tendrá la mitad de las 3.378 toneladas de oro de la reserva completa alemana, con el resto en Nueva York y Londres. Los representantes del Bundesbank anunciaron que no habrá más transferencias y la presidencia de Donald Trump no cambiará la situación ya que "existe una relación de confianza con la Reserva Federal de EEUU".
Durante la Guerra Fría, Alemania Occidental conservaba la mayor parte de su oro en el extranjero por temor a que pudiera caer en manos de la Unión Soviética si el país fuera invadido. También se trataba de para tener el metal precioso cerca de los mercados de moneda extranjera en Londres, París y Nueva York, donde el oro se negocia.