"Ya que estas acusaciones vacías, sin pruebas, calumniosas continúan saliendo a flote, quisiera decir que el cinismo que aflora en esta situación radica en que aquellos que nos acusan son los mismos que interfirieron activamente en esta campaña electoral", señaló.
El canciller ruso expresó que "sinceramente hablando, ya comienza a cansarnos el debate del tema de la injerencia rusa en los asuntos internos de EEUU, particularmente relacionados con la campaña electoral que concluyó con la elección del presidente Trump".
"No nos metemos en esas discusiones, nuestra posición de principio es apartarnos de lo que suceda ahora en EEUU entre la administración saliente y el equipo de Donald Trump, pero los ataques de los representantes del equipo de Barack Obama contra el presidente electo por momentos son hipócritas", acertó.
Además, criticó a los países occidentales que acusan a Rusia de entrometerse en los asuntos de terceros países de querer hacer pagar a justos por pecadores.
"Es hora de afrontar el hecho de que no es Rusia, sino los aliados norteamericanos quienes interfirieron de modo burdo en los asuntos internos de EEUU, en la campaña electoral, y muchos de ellos, por cierto, todavía no pueden lidiar con sus sentimientos y acabar de tranquilizarse", señaló.
Lavrov recordó la reciente reacción del secretario de Estado de EEUU, John Kerry, ante las declaraciones del presidente electo a medios de prensa europeos.
En ese sentido alegó que "eso lo dicen personas que no solo en palabras quisieron dar lecciones a otros países, incluyendo a Europa; por ejemplo, Barack Obama personalmente se expresó contra el Brexit"
"Eso lo dicen personas que se entrometen en los asuntos ajenos de los modos menos inofensivos posibles, con el uso de la fuerza militar para derrocar regímenes, por lo que ya no se trata de dobles raseros, sino de triples", acusó.
Lavrov aseguró que estos políticos deberían "al menos sonrojarse a la hora de acusarnos de este modo, tratando de que paguen justos por pecadores".