Anteriormente, el diario The Washington Post informó que la CIA había llegado a la conclusión de que los ataques fueron llevados a cabo por Rusia con el objetivo de instalar a Donald Trump en la Presidencia. La Administración del presidente saliente, Barack Obama, apoya este punto de vista y anima a llevar a cabo la investigación correspondiente. Afirma, no obstante, que dicha investigación no pone en tela de juicio los resultados de las elecciones.
Murray asegura que la situación es bastante extraordinaria y no ha habido precedentes similares. "Está claro que se trata de un intento deliberado de socavar la autoridad del sucesor de Obama. Y, por supuesto, de torpedear aún más las relaciones con Rusia. EEUU, o al menos la Administración de Barack Obama, tienen, según parece, la firme intención de propagar la rusofobia y tener una relación muy hostil con Moscú", considera el experto.
El experto también se quejó del hecho de que la Administración estadounidense quiere que todo el mundo obtenga información solo de los medios de comunicación oficiales. Por otra parte, la censura se extiende también a las redes sociales, como Facebook y Twitter. Por ejemplo, su cuenta allí fue bloqueada, como las cuentas de muchas otras figuras públicas. "Así que no solo quieren socavar la credibilidad de los medios de comunicación que no controlan, sino también tomar el control de las redes sociales e internet en general", concluye Murray.