"Hemos abordado estos temas, los hemos discutido con el presidente Obama y el vicepresidente Biden. Ellos fracasaron en aprovechar la ocasión y lidiar con estos problemas de manera seria. Y es bastante decepcionante para nosotros", dijo Erdogan.
Agregó que la guerra en Siria creó una amenaza para la seguridad en las fronteras del sur de Turquía e impidió las capacidades de defensa turcas, así como provocó la llegada de unos 3 millones de refugiados al país.
Siria vive desde el año 2011 un conflicto en el que el Ejército gubernamental se enfrenta a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas, entre ellas Daesh y el Frente al Nusra —actualmente denominado Frente Fatah al Sham—, proscritos en Rusia y varios países. Desde su comienzo, la guerra en Siria provocó entre 300.000 y 400.000 muertos, según la ONU.
El Gobierno de Damasco protestó reiteradamente por la intervención militar de Turquía en el norte de Siria, al subrayar que viola la soberanía del país. También los kurdos sirios condenaron la operación turca que, a su juicio, apunta contra ellos más que contra Daesh.