Por el momento no hay información alguna sobre las víctimas de los ataques.
La fuente especificó que los ataques procedieron de Arabia Saudí.
Yemen es escenario de violentos enfrentamientos entre los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá y los partidarios del expresidente Alí Abdalá Saleh, por una parte, y las fuerzas leales al presidente legítimo, Abdo Rabu Mansur Hadi, por otra, a las que apoya desde marzo de 2015 una coalición de países del Golfo Pérsico y África del Norte liderada por Arabia Saudí.
El conflicto armado provocó el pasado año unos 6.400 muertos y más de 30.000 heridos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) que menciona también la cifra de 2,5 millones de desplazados internos y más de 20 millones de personas que necesitan ayuda humanitaria.
En abril de 2016, las partes en conflicto empezaron en Kuwait negociaciones directas con la mediación de la ONU.
Gracias al proceso negociador fueron liberados en los últimos dos meses 700 prisioneros y detenidos, entre ellos 50 niños, según el enviado especial de la ONU para Yemen, Ismail Ould Cheikh Ahmed.