"En la Ciudad de México, que se supone está gobernada por la izquierda (Partido de la Revolución Democrática), los periodistas prácticamente tienen que ir con casco a las manifestaciones, porque siempre hay un policía que le quiebra la cabeza a alguien", ejemplificó Pastrana, que fundó en 2007 esta red dedicada a promover los derechos humanos en el terreno periodístico.
"Y ya sentimos que estamos menos mal, porque no tenemos 14 asesinados, como llegamos a tener en algún año", criticó Pastrana, colaboradora de medios internacionales, autora de varios libros, exbecaria de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano y profesora.
Además, entre 2003 y este año, 23 reporteros han desaparecido en este país, casi dos por año.
"Salieron a trabajar y no regresaron nunca y nadie nos puede decir por qué no están", dijo Pastrana.
Como estos crímenes "no tienen ninguna consecuencia, los periodistas mexicanos nos tuvimos que volver expertos no solo en contar las historias y documentarlas, sino en cómo protegernos y mantenernos con vida", describió.
Regresión enorme
En su opinión, en la última década, el ejercicio de la libertad de prensa, ha "tenido una regresión enorme" en México.
Cuando se inició Periodistas de a Pie para mejorar la práctica profesional y las coberturas de temas como el narcotráfico y la violencia, "la proporción entre empleados de un medio y freelance era de siete u ocho contra dos y ahora eso se ha invertido, somos puros freelance", describió.
El otro factor es la violencia que se disparó a partir de la militarización de la lucha contra el narcotráfico, desplegada por el Gobierno de Felipe Calderón (2006-2012).
"No es guerra, es una estrategia militar, pero tiene consecuencias de guerra", indicó Pastrana.
Según la reportera, "ahora prácticamente cualquiera puede hacerle algo a un periodista sin sufrir consecuencias".
El último factor de agravamiento, a juicio de Pastrana, es el retorno en 2012 del Partido Revolucionario Institucional (PRI) al Gobierno, de la mano de Enrique Peña Nieto, por el "autoritarismo" que conlleva.
Ahora "ser crítico, defensor de derechos humanos, reportero o académico constituye un doble peligro" sobre todo en ciertas regiones, dijo.
Chihuahua
El artículo de marras señala que "se impondrán de uno a tres años de prisión y de cincuenta a mil días de multa al que, para obtener un beneficio o causar un daño, indebidamente produzca o edite, por cualquier medio técnico, imágenes, textos o voces, total o parcialmente falsos o verdaderos".
Para Pastrana, así se abre la puerta a que "te puedan meter a la cárcel por publicar algo que perjudique a alguien".
Entre las estrategias que aplican Periodistas de a Pie figuran los protocolos de seguridad para zonas peligrosas, la protección en Internet para que los datos de las víctimas no sean hackeados y los esfuerzos para realizar reportajes y coberturas colaborativas.
Para este 3 de Mayo, Día Mundial de la Libertad de Prensa, la ONU eligió como lema "Acceso a la información y a las libertades fundamentales. ¡Es tu derecho!".
