"La opción militar produce más terroristas. A principios de los años 2000 había una cuna que producía terroristas internacionales en Afganistán y hoy tenemos diez o doce cunas", explica el analista internacional.
"Estamos construyendo focos que son difícilmente reversibles. Porque la guerra produce guerra", alerta.
"Las bombas son interpretadas por la población civil como una agresión exterior que da más fuerza a esos grupos, que se sienten legitimados", opina.
Esta madrugada, diez cazas del ejército francés lanzaron 20 bombas en Raqqa, uno de los bastiones de los yihadistas.
El experto cree que, entre otras medidas, hay que parar la financiación, la venta de armas o de la compra del petróleo que ellos venden.
En esa unión de fuerzas es importante que esté Rusia, según el experto.
"Creo que es bueno que a Rusia se la incorpore de nuevo en el proceso de discusión multilateral, porque es un interlocutor central de la región con sus propios intereses", afirma el experto.
Sin embargo, tampoco cree que la intervención militar de Rusia en Siria sea la solución.
"Es importante el trabajo político. Con toda la experiencia en las redes diplomáticas que tiene Rusia en Oriente Próximo me parece un tema central. Sin duda es un actor con el que hay que contar", apunta.
Auge de Le Pen
Los atentados perpetrados en París pueden producir un discurso del miedo que aprovechará el Frente Nacional, según explica Ralle.
Ralle cree que la sociedad francesa no siempre se ha ido "hacia las doctrinas del odio y del rechazo al otro" en atentados de los últimos años. Sin embargo, destaca que esta masacre se produce en un momento de gran auge para el Frente Nacional, la formación de extremaderecha que lidera Marine Le Pen.
No obstante, el político destaca la especial importancia de que los terroristas hayan nacido en Francia y Bélgica.
Tema: Ataques terroristas en París
"Esto demuestra que el problema es mucho más complejo" que va mucho más allá del "cierre de fronteras" como proponen muchos partidos de la derecha francesa.
Los grandes perjudicados de este "discurso del odio" y del cierre de fronteras están siendo los refugiados, que huyen del terror que viven en sus países.
"El refugiado huye del infierno que hemos vivido en París", apunta Ralle.
El analista internacional cree que Europa "está funcionando al revés". "Siempre hemos abierto las puertas a los refugiados de las guerras. Sin embargo, ahora parece que hemos olvidado nuestros valores universales, que son tanto el derecho al asilo como el deber de cooperación al desarrollo", explica a esta agencia.