Una parte de los que se une al movimiento extremista perece en Siria, pero otra parte vuelve a su lugar de origen en un intento de reclutar nuevos combatientes y "novias" para aquellos que se han alistado ya en las filas del EI.
"Hace cerca de un mes me llamó en medio de la noche un hombre desconocido y me pidió que le ayudara a encontrar a su sobrina, a quien 'se la habían llevado a un lugar desconocido'. Enseguida comencé a llamar a todos los números que conozco para encontrar a la desaparecida", cuenta a nuestro corresponsal Jeda Sarátova, miembro del Consejo Presidencial de Chechenia.
Sarátova, que sigue de cerca el tema de las "fugitivas del EI", cuenta que la chica de 17 años y sus dos acompañantes, otras chechenas jóvenes, fueron encontradas en unos minutos en una comisaría de la policía de Grozni, a donde las habían llevado después de recibir la información operativa de que en los próximos días las tres se disponían a partir a Siria.
"Cuando llegué a la estación de policía a las tres de la madrugada, allí se encontraban tres chicas de 17 a 22 años, vestidas de negro y con pañuelos del mismo color en la cabeza, sus rostros eran impenetrables como los de unos zombi", señala Sarátova.
La defensora de DDHH, que logró comunicarse con una de las detenidas, afirma que la chica solo conocía el nombre de su futuro marido.
El viceministro del Interior de Chechenia, Apti Alaudínov, destaca que en la región se realiza un trabajo constante para evitar que nuevos jóvenes de Chechenia nutran las filas del EI.
"Poseemos información de los contactos, los canales de partida, llegada, los traslados, muchas veces la gente nos pide ayuda y les ayudamos a para hacer retornar a sus hijos, un papel fundamental en esa labor lo ejercen los líderes religiosos", dijo Alaudínov al corresponsal de RIA Nóvosti.
El viceministro subrayó que los chechenos son reclutados ante todo a través de las redes sociales, y resulta más fácil atraer a personas de menor edad, pues su mente es como una tabula rasa.
Alaudínov destacó que se ha logrado devolver a sus hogares a algunos jóvenes y añadió que cada vez más habitantes de otras regiones de Rusia piden ayuda para lograr recuperar a sus parientes fugitivos.
"Tratamos de ayudarles en la medida de nuestras posibilidades", señaló.
Según datos del Ministerio del Interior de Rusia, desde el inicio de las hostilidades en Siria unos 405 chechenos partieron a ese país, de los cuales 104 han perdido la vida, mientras 44 han vuelto a la región.
En Chechenia se han abierto 88 casos penales al respecto, hay personas que recibieron condenas e incluso ya han sido puestos en libertad tras cumplir su plazo en prisión.
A las chicas se les prometía un lugar en los jardines del Paraíso al final de su vida terrenal.
En total el grupo que planeaba viajar a Siria contaba junto con la reclutadora con cinco mujeres jóvenes, todas ellas dotadas de un "novio virtual" con el que debían reunirse al llegar al lugar.
Actualmente la policía lleva a cabo una labor de profilaxis en la que participan sus padres y líderes religiosos.