"Creo que Rusia debe recibir garantías (…) de que el ingreso de Ucrania en la OTAN es una perspectiva no realista", dijo el canciller, añadiendo que "Occidente debe tomar nota de la declaración del presidente ruso de que él no tiene intenciones agresivas".
El canciller dijo compartir la opinión expresada por Vladímir Putin a Corriere della Sera de que a Rusia e Italia las unen unas relaciones privilegiadas.
Tras declarar que Roma acatará las decisiones tomadas por la Unión Europea y EEUU sobre la crisis ucraniana, Gentiloni al mismo tiempo indicó que Roma insistirá en la necesidad de mantener abiertos los canales de diálogo con Moscú.
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El canciller recalcó la importancia de la participación de Rusia en la solución de los problemas internacionales como el programa nuclear de Irán, la situación en Siria y Libia, la protección del entorno y el desarme.
Al ser consultado sobre la posibilidad del restablecimiento del formato G8, Gentiloni respondió que será difícil imaginarlo mientras no se solucione la crisis en Ucrania, "pero en un futuro es probable", afirmó.
