"Hoy día (…) como posible candidato, Ucrania no solo no está convincente, sino que está horrible; todos en la Alianza son conscientes que Ucrania no es capaz de aportarle nada que no sean nuevos problemas", dijo en una entrevista con el diario Izvestia.
Al entrar en la OTAN, Kiev insistiría en que la Alianza se gastara cantidades astronómicas en desplegar bases en Ucrania, algo que "gran parte de Europa no necesita", manifestó.
"Europa no quiere tener un aliado militar que se declare en estado de guerra con Rusia", recalcó.
Según el legislador ruso, "en París, Berlín y otras capitales europeas" dejan claro que Ucrania no puede aspirar a ser miembro de la OTAN o la UE en un futuro próximo.
Incluso Polonia y EEUU, los dos países que más apoyan al nuevo régimen de Kiev, no ven posible el ingreso de Ucrania en el bloque, subrayó.
"Porque en ese caso aumentaría el riesgo de una confrontación política y militar directa con Rusia", dijo.
Además, Washington teme que este asunto pueda provocar una fuerte división interna en la Alianza, algo que llevaría a su vez a que EEUU perdiera peso dentro de la OTAN, concluyó.