Una vez registrados, los nuevos reclutas pasan por un duro entrenamiento militar y religioso. Pero los menores que combaten o están al servicio del EI, a los que los propios yihadistas llaman “cachorros del califato”, no son solo adolescentes que se han alistado voluntariamente.
Unos 500 niños han sido secuestrados o reclutados por el EI en Irak, según las autoridades iraquíes, para ser utilizados como combatientes o suicidas. A estas víctimas se las ha trasladado a territorio controlado por el EI y se las ha obligado a entrenar en campos del grupo yihadista.
El EI “ha secuestrado a al menos 400 niños en la provincia oeste de Al Anbar y los ha trasladado a sus bases en Irak y Siria”, explicó Farhan Mohamed, del consejo provincial de Anbar, a la agencia turca Anadolu.
Por su parte, el jefe de la policía en la provincia de Diyala (Irak), Kasim al Saidi, dijo que unos cien niños menores de 16 años fueron reclutados por el EI para cometer ataques suicidas.
Los niños han sido utilizados también en vídeos de propaganda. En uno de ellos aparecía un niño kazajo de no más de 10 años que presuntamente asesinaba a dos rusos acusados por el EI de ser espías. El mismo menor había salido en una grabación que mostraba un campo de entrenamiento para reclutas de Kazajistán en la ciudad siria de Raqa, bastión del EI.
En otro vídeo se ve a un niño francés que no aparenta más de 12 años ejecutando a un palestino de Israel acusado de espionaje. En otra grabación, en este caso del asalto del EI al complejo de la refinería de Baiji, aparecen niños utilizando un arma que parece un obús M198 fabricado en EEUU para atacar a las Fuerzas de Seguridad Iraquíes (FSI).
Un vídeo más mostraba a un adolescente que aparentemente llevaba a cabo un ataque suicida en Irak. Y en la revista en inglés que el EI publica en internet, llamada Dabiq, el EI justifica el uso de menores de edad como verdugos.
El EI tiene un campo de entreno para niños en Damasco (Siria), varios en Raqa (Siria) y Mosul (Irak), al menos uno en Tal Afar (Irak) y diversos en Deir al Zur (Siria). Otros grupos yihadistas en Siria también tienen campos donde entrenan a menores de edad.
Un informe del Consejo de Derechos Humanos de la ONU señala que el EI “ha establecido campos de entrenamiento para reclutar a niños para combatir bajo la apariencia de campos de educación”.
“La existencia de estos campos parece indicar que el EI entrena sistemáticamente en el manejo de armas a niños (…) y los despliega en combates durante operaciones militares, incluidas misiones suicidas”, indica el informe.
“A los niños se los utiliza para una variedad de roles: como combatientes, mensajeros, espías, guardias, porteros, para vigilar puestos de control y armas y para 'tareas domésticas' como cocinar, limpiar, traer agua o ayuda médica a los heridos en apoyo de varias parte del conflicto”, ha asegurado la representante de Unicef.
Según Touma, “hay indicaciones de que se recluta a niños a una edad muy temprana y de que se los usa cada vez más para combates. Hay indicaciones de que los reclutamientos (de menores) se han producido tanto dentro como fuera de Siria, pero la ONU no ha podido verificar casos de reclutamiento fuera del país”.
Unicef ha llamado “a todas las partes en conflicto a cumplir con sus obligaciones según las leyes internacionales humanitarias y de los derechos humanos”, ha dicho Touma.
“Ningún niño tendría que ser reclutado o utilizado de ninguna manera por fuerzas y grupos armadas”, ha subrayado.
La ONG Human Rights Watch (HRW) denunció ya en 2014 la utilización de “niños de hasta 15 años para luchar en el campo de batalla, a veces reclutándolos con el pretexto de brindarles educación” por parte de grupos armados sirios, en su informe “Tal vez vivamos y tal vez muramos”.
“Grupos islamistas extremistas como el Estado Islámico han reclutado específicamente a niños mediante campañas de educación gratuita que incorporan el entrenamiento con armas, y les han encargado tareas peligrosas, incluso misiones suicidas con bombas”, denuncia el documento.
El informe de HRW también recoge varios testimonios de niños soldado.
“[Cuando estalló el levantamiento en Siria], yo era un estudiante de noveno grado. En la escuela, organizamos manifestaciones pero la policía nos atacaba. Las Shabiha [las milicias progubernamentales] también actuaba en contra de nosotros”, relató a HRW “Riad” (nombre falso para proteger su identidad), de 17 años.
Este adolescente luchó con el Ejército Libre Sirio (FSA) cuando tenía 15 años, después acudió a un campo de entrenamiento militar de ISIS y luego se alistó en Harakat Ahrar al-Sham al-Islamiya (Ahrar al-Sham).
“Tras las protestas, decidimos que todos saldríamos con el FSA. Después de luchar, trabajé en la comisaría de policía para los rebeldes. Entonces llegó el EI para controlar el puesto y me gustó su forma de actuar, el aspecto que tenían y decidí unirme a ellos. Así que fui a su campo de entrenamiento en Kafr Hamra, en Alepo”, contó Riad.
Allí "había cerca de 250 a 300 personas. Había muchas personas menores de 18 años. Había niños más jóvenes que yo, de 13 y 14 años e incluso menores”, dijo Riad.
“(A los del EI) les gustaban los jóvenes, porque se convertirían en luchadores fuertes. El líder del campamento dijo que prefería a los más jóvenes”, comentó el adolescente.
Según Riad, “era un campo muy difícil… Entraban en nuestra tienda de campaña y disparaban al aire y no nos dejaban dormir para que nos levantáramos y saliéramos a hacer guardia en una zanja. Muchas veces nos quedábamos dormidos en esta trinchera porque estábamos muy cansados”.
“En enero de 2013, decidí unirme a Ahrar al-Sham. Les dije que había recibido entrenamiento en el campamento del EI, así que me dieron un arma, un Kaláshnikov [fusil de asalto]. Fui a la batalla 'Comisaría de Policía 70' y después fui a la de Latakia en Jabal Turkmen. Luego a Alepo. Luché en la línea de apoyo, nuestro misión consistía en evitar que el ejército avanzara”, señaló.
El informe de HRW documenta las experiencias de 25 niños y exniños soldados en el conflicto armado de Siria que lucharon con el Ejército Libre Sirio, la coalición del Frente Islámico y los grupos yihadistas Estado Islámico y Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, así como con las fuerzas militares y policiales en las zonas controladas por los kurdos.
El uso de niños en los conflictos armados viola el derecho internacional. Muchos de los reclutados son menores que han visto cómo sus familiares han sido asesinados, sus escuelas bombardeadas y sus comunidades destruidas.