Rato, hoy apartado del escenario político y con varias causas abiertas por corrupción, tuvo que escuchar en el corto recorrido hacia su coche gritos de los transeúntes de "hijo de puta", "rata", "cabrón" y "ladrón", ante decenas de medios de comunicación.
El que fue uno de los políticos más importantes de España quedó en libertad esta madrugada, tras ser detenido mientras la Policía y agentes de aduana registraban durante siete horas su domicilio y su despacho.
"Se está completando el registro de ayer", dijeron hoy fuentes jurídicas.
Durante el día de ayer, los agentes de aduanas requisaron abundante material tanto en la casa particular de Rato como en su despacho, del que sacaron más de veinte de cajas de cartón de grandes dimensiones.
Rato está acusado de fraude, blanqueo de dinero, tráfico de divisas (12 millones de euros) y alzamiento de bienes para evitar el embargo por su responsabilidad en el denominado caso Bankia.
Según fuentes jurídicas que cita el diario El Mundo, el economista creó sociedades en EEUU, Holanda, Reino Unido, Gibraltar, República Dominicana y Suazilandia a nombre de su exmujer, tres hijos, su hermana y una sobrina.
Rato dijo esta madrugada que "tengo confianza en la Justicia y he colaborado activamente con ella".
La detención y posterior puesta en libertad del expolítico, una vez finalizados los registros, ha sido considerado un durísimo varapalo para el gobernante Partido Popular, asediado por numerosos escándalos de corrupción entre sus filas, en plena precampaña electoral.
La detención se produjo después de conocerse que Rato, suspendido de militancia del PP, se acogiese a la amnistía fiscal que aprobó el Ejecutivo de Mariano Rajoy en 2012.
Según varios medios, Rato pasó poco después a formar parte de los 705 investigados por la posible comisión de un delito de blanqueo de capitales, a través del Servicio Ejecutivo de Prevención y Blanqueo de Capitales (Sepblac).
Los registros, en los que Rato estuvo presente, fueron realizados por la Policía Nacional conjuntamente con los Servicios Aduaneros de España vinculados al contrabando, blanqueo de dinero y delitos fiscales.
El propio Rato negó la mañana del jueves tener fondos en cuentas de paraísos fiscales de Gibraltar o las Islas Vírgenes, hecho que le imputa el Servicio Fiscal.
Además, Rato ha sido incoado por falsificación de datos durante la oferta pública inicial de Bankia en la Bolsa en 2011, caso que también implica a 30 exdirigentes del banco, así como en el caso llamado de las tarjetas 'black', por los que la entidad que tuvo que ser rescatada con dinero público pagaba un sobresueldo en negro a sus directivos.
Esta investigación llevaba "meses" trabajándose "codo a codo" entre la Fiscalía Anticorrupción y Hacienda.
Pero, en el último momento, y de manera "inexplicable y sin previo aviso", según fuentes de Anticorrupción, el departamento que dirige el ministro Cristóbal Montoro decidió ayer transmitir el caso a la Fiscalía provincial de Madrid.
Según fuentes jurídicas, citadas por los medios españoles, este cambio acota unas pesquisas "mucho más ambiciosas" que afectaban también a "decenas" de sociedades vinculadas Rato en "España y en paraísos fiscales", como Gibraltar y la isla de Tórtola, en Reino Unido, y a numerosas personas.