Mabel Lozano es una reconocida periodista, cineasta y actriz española que lleva más de 12 años denunciando las barbaries que se esconden detrás de las luces de neón de los burdeles.
Mabel Lozano conversa con Sputnik sobre prostitución, el consumo del porno y la trata de personas con fines de explotación sexual, temas que recurrentemente salen a la palestra pública en España, pero sobre los cuales aún no se ha legislado.
—Expertos en violencia sexual han denunciado durante varios años que España es uno de los principales destinos de trata y tráfico de personas con fines de explotación sexual. ¿Por qué España se convirtió en un “paraíso” para las mafias de proxenetas?
Hay varios temas básicos. Lo primero es que en España la prostitución está normalizada, legitimada de toda la vida.
Tercero porque también somos la puerta para Europa para muchas mujeres, por ejemplo, para las africanas, las nigerianas. Por último, tenemos una climatología que nos permite tener a muchas mujeres prostituyéndose en las calles, porque toda nuestra costa de Levante y Andalucía lo permite por la temperatura. Todo eso hace que seamos un país idóneo.
—¿A partir de cuándo se empieza a dar esta situación?
A partir del siglo pasado. Miguel el Músico, con el que he trabajado en mi documental El proxeneta, que era uno de los grandes proxenetas españoles, cuenta que él y otros veinte idearon llegar a América Latina para captar a las mujeres ahí, traerlas a España y explotarlas sexualmente.
Entonces, a finales del siglo pasado nuestros clubes españoles empezaron a estar atestados de mujeres latinoamericanas, sobre todo colombianas, paraguayas, dominicanas, y nadie preguntó por dónde venían, quién hacía su proceso migratorio, cómo habían llegado hasta ahí.
—¿Quiénes controlan y dirigen esta actividad en España?
No más de una veintena de hombres españoles que son los dueños de los burdeles de toda la vida.
Como ellos siempre van unos pasos por delante, ya a las mujeres las traen directamente a pisos porque son más inaccesibles para las fuerzas de seguridad del Estado. En esos pisos es donde las alecciona y una vez aleccionadas pasan al flujo del sistema prostitucional: a grandes burdeles o burdeles de segunda, de tercera categoría, y finalmente acaban en la rotonda, en la calle.
—El proxenetismo es uno de los negocios más lucrativos del mundo. Se dice que en España supera los 5 millones de euros al día. A la vez son pocas las detenciones y sentencias contra proxenetas ¿cómo hacen ellos para operar a sus anchas?
De los 5 millones que mencionas es muy importante que resaltes que es en negro. Claro, es un sistema con cientos de complicidades, lógicamente. A ver, el dinero lava muchas conciencias. Sabemos que el narcotráfico mata a muchísima gente, pero ¿por qué sigue existiendo?
—Recientemente, una columna del diario Público, decía que el año pasado España ocupó el puesto 12, entre todos los países del mundo, con el mayor número de visitas en una web porno y que el video pornográfico más visto escenifica una violación grupal a una mujer. ¿Tiene alguna relación el consumo de este tipo de porno con las más de 100 agresiones en manada que se han denunciado desde 2006?
Claro, claro. Totalmente. En España el porno no está regularizado, quiere decir que se está accediendo a contenido de una gran violencia por parte de chavales muy jovencitos.
Repito, para esos chavales la pornografía es simplemente ocio. La pornografía no está regulada. Entonces, un chaval de 9 o 10 años está viendo una violación, el dominio, la sumisión hacia la mujer y nadie les ha creado un pensamiento crítico, de decirles "vamos, lo puedes ver", pero eso no tiene nada que ver con la realidad, con el deseo, con las relaciones consensuadas y consentidas, porque en el porno, como en la prostitución, el hombre manda y la mujer cumple sus órdenes.
—Desde 2018 el gobierno dice que está trabajando en una Ley Integral contra Trata de seres humanos ¿qué ha pasado?, ¿por qué no avanza?
No, no ha avanzado. Primero el gobierno dijo que estaba avanzando una ley contra la trata, y yo levanté la mano porque no, contra la trata no vale.
—¿Qué más se podría hacer?
Yo he puesto todo el rato sobre la mesa otra ley, que es importantísima y no costaría nada hacerla, que es tipificar todas las caras del proxenetismo. No puede existir el proxenetismo consentido, que no está penalizado por ley, son las tercerías locativas.
—¿Qué le dirías a las mujeres en situación de vulnerabilidad para que no se dejen captar por estas mafias?
Es que es muy fácil decirle a un tercero que no tiene para comer y que vive en una situación de grandísima violencia, decirle qué hacer. Cómo le digo a una mujer que tienes 4 hijos, dos por violaciones, lo que tiene que hacer. Es muy fuerte.