Ni Torremolinos, ni Benidorm, ni Mallorca. Este otoño, ninguna localidad de costa o interior de España recibirá el típico aluvión de pensionistas y mayores de 65 años que se suele producir a finales del verano. Y es que el Gobierno ha acordado la suspensión de lo que queda de la temporada de los viajes del Imserso. Programa que llevaba meses en estado de hibernación a raíz de la pandemia de coronavirus.
Ante el reproche de la diputada del PP Alicia García por esta cancelación, Álvarez ha recordado que lo que se cancela no es el programa, es la temporada. El secretario de Estado de Derechos Sociales ha remarcado el peligro que supondría permitir realizar viajes a uno de los sectores más vulnerables ante la enfermedad.
"Sería una insensatez que el Gobierno ponga a viajar a miles de personas mayores en este momento de pandemia", ha subrayado.
Álvarez ha comentado que para realizar estos desplazamientos es necesario que los mayores se trasladen a los destinos finales en trenes y autobuses, acto que "no se puede producir en esta situación". Cada año, un millón de personas disfrutan de este programa de turismo social que, según el técnico del Gobierno, es "un icono de este país". Motivo por el que quieren salvaguardar este modelo y desde este momento van a trabajar en la reorganización de la nueva temporada teniendo en cuenta las nuevas condiciones derivadas de la pandemia, ha asegurado el secretario de Estado de Derechos Sociales. Así, se evitan situaciones como las vividas el pasado mes de marzo, en las que 50.000 viajeros apuntados del Imserso quedaron atrapados en sus destinos y se produjeron dificultades para retornarlos a sus lugares de origen.
Problemas en el sector
El ascendente número de positivos diarios en España hace que sea muy complicado mantener los viajes del Imserso. "No se puede tomar otra decisión que no sea suspender la temporada actual", ha dicho Álvarez, quien también se ha mostrado preocupado por el sector turístico, uno de los más golpeados por el coronavirus.
La decisión tomada por el Gobierno supone un golpe duro para el sector. En total, agencias y hoteles perderán unos 350 millones de euros con la suspensión de los viajes del Imserso, lo que también comprometería la supervivencia de miles de puestos de trabajo. Medida con la que la mayoría de entidades dedicadas al turismo no están de acuerdo. La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) la considera una "muy mala noticia". Según el comunicado compartido con la prensa, la mejor opción hubiese sido "una suspensión temporal o un aplazamiento".
HOSBEC considera precipitada la cancelación del #IMSERSO y pide la negociación de un nuevo pliego de condiciones para 2021. Ante las situaciones excepcionales necesitamos medidas excepcionales para contribuir a la recuperación turística".
— HOSBECValencia (@HosbecValencia) September 22, 2020
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Más contundente ha sido la patronal hostelera Hosbec, centrada en Benidorm, Costa Blanca y Comunidad Valenciana, que la ha tachado de "radical, precipitada y contradictoria con la política gubernamental de crear corredores turísticos seguros con los principales mercados europeos". "La cancelación, desde luego, es la peor de las soluciones si no va acompañada de otras medidas. La demanda turística sigue existiendo. Desde luego es menor que la de años anteriores, pero hemos acumulado mucha experiencia durante este verano en gestionar destinos y establecimientos con muchas medidas de seguridad".
"Por eso invitamos al Gobierno de España a reflexionar sobre su decisión y a poner en marcha otros programas alternativos que permitan funcionar a los establecimientos hoteleros que permanezcan abiertos durante los próximos meses", ha afirmado el presidente de la asociación, Toni Mayor.
Más compresiva se ha mostrado la Asociación Nacional de Balnearios. Desde la organización piden que el programa sea prorrogado para el ejercicio de 2021 para evitar las esperas administrativas que podrían afectar a la negociación de nuevos contratos. No obstante, consideran razonable que se suspendan los viajes, al menos en su ámbito. "El anuncio de una suspensión de lo que resta del año parece razonable en el caso de los balnearios", ha indicado el presidente de la Asociación Nacional de Balnearios, Miguel Mirones, en un comunicado.
Por su parte, el presidente de la Confederación Española de Agencias de Viaje (CEAV), Carlos Garrido, entiende la decisión, pero también ha lamentado que no se haya creado ningún plan alternativo para incentivar la demanda interna, como sí han hecho otros países. Algún programa para paliar el mal año vivido por las agencias de viajes, entidades que han perdido el 90% de los 25.000 millones de euros que facturan anualmente.
"Es una malísima noticia. Las agencias de viaje llevamos más de seis meses sin facturar un euro. Estamos en una situación muy crítica y esto agrava más nuestra situación. Necesitamos algún plan para reactivar el mercado y esta medida no favorece. Además, puede afectar a la imagen que estamos intentando labrar de España como destino seguro. Sin duda, puede tener un coste reputacional", ha asegurado Garrido a Sputnik Mundo.
La decisión de los viajeros
Mientras, la tranquilidad parece reinar entre los otros grandes afectados por la cancelación. Los apuntados al programa Imserso no parecen preocupados por no poder acceder a los casi 900.000 paquetes de estancias entre siete y 14 noches.
Opinión que comparte con Isabel. Esta viajera residente en Valencia lleva más de cuatro años yendo a distintos lugares de España con el Imserso, como Santa Cruz de Tenerife, Salou o la Manga del Mar Menor. El coronavirus le impidió viajar a la localidad almeriense de Roquetas de Mar en abril. La avisaron con poco tiempo sobre la cancelación de su viaje. Pero, no le importó en exceso. Le gusta viajar, pero tampoco iría a ningún sitio ahora.
"Yo si lo tuviese concedido para ahora, no iría. Preferiría perder el dinero", ha sentenciado.