"No permitieron que se haga de forma abierta en general la presencia de observadores legales, sobre todo de Amnistía Internacional. Ellos estaban inscritos, tenían que darle la oportunidad de observar el juicio y sin embargo no se la han dado (…) Es un juicio secreto", dijo a Sputnik Poveda, quien forma parte del equipo de defensa del ciberactivista.
Este 7 de septiembre comenzó en Londres el juicio de extradición a EEUU de Assange.
Poveda explicó que las organizaciones de derechos humanos lo que intentan hacer es vigilar que se cumpla el debido proceso y que se respeten los derechos de Assange.
"Sin embargo, a última hora se restringe su acceso. Es un juicio muy secreto, reservado y confidencial. La verdad es que es una irregularidad. Si tienes un proceso público, ¿qué escondes? Al contrario, siendo un caso emblemático a nivel mundial, deberían darse todas las garantías. Y más cuando es un periodista, es decir, ¿qué se está maquinando? ¿Por qué tanta restricción? ¿Qué se está planeando internamente?", preguntó el abogado.
El 21 de febrero, Amnistía Internacional afirmó que EEUU y el Reino Unido debían retirar los cargos y suspender la extradición contra Assange.
"Julian Assange no debe ser extraditado a EEUU pues de ser trasladado a ese país corre riesgos de violación de derechos humanos. Las autoridades estadounidenses deben retirar los cargos de espionaje y otros que pesan sobre él y, además, Assange debe ser puesto en libertad de inmediato", alertó Amnistía en un comunicado.
La organización sostuvo que Washington realizó una "implacable persecución" contra Assange por la publicación de documentos sobre crímenes de guerra, lo que significa "un ataque en toda regla al derecho a la libertad de expresión".
Assange está acusado por EEUU de 18 delitos, la mayoría por violaciones a la ley de espionaje, luego de que filtrara miles de documentos clasificados sobre las operaciones del Ejército estadounidense en Irak y Afganistán.
Otras denuncias
La defensa de Assange solicitó este 7 de septiembre el aplazamiento del juicio de extradición en vistas a que EEUU presentara formalmente un nuevo procesamiento en las últimas semanas.
La jueza encargada del caso, Vanessa Baraitser, justificó su negativa precisamente en la oportunidad que ella mismo dio a la defensa a mediados de agosto para pedir el aplazamiento de las audiencias.
"El otro tema es que ha habido una restricción bastante fuerte de los abogados de Julian. El pedido de extradición se dio a conocer esta mañana y los abogados no pudieron preparar la defensa. Desde febrero se ha restringido el derecho a la defensa. Las cosas están complejas y sobre todo lo que nosotros vemos es que hay una desigualdad de defensa", agregó.
Assange se refugió en la embajada ecuatoriana en Londres en 2012, tras perder todas las apelaciones contra la extradición que el Reino Unido se aprestaba a cumplir, accediendo al pedido de la Fiscalía sueca que lo requería para interrogarlo por presuntos delitos sexuales.
Ecuador anuló el asilo al ciberactivista australiano el pasado 11 de abril, y este fue inmediatamente encarcelado por la Justicia del Reino Unido, que lo requería por haber violado las condiciones de su libertad provisional en 2012.