"El 27 de agosto de 2020 la Fiscalía General de Rusia (...) remitió a los organismos de justicia encargados de la República Federal de Alemania una solicitud de asistencia jurídica con los materiales de una inspección realizada por los organismos investigadores del Ministerio del Interior ruso respecto a la hospitalización del ciudadano ruso Alexéi Navalni", dice el comunicado.
Ivanov indicó que "a pesar de que el 20 de agosto comenzó una investigación preliminar, hasta el momento no se ha encontrado ningún dato que apunte a actos criminales intencionales contra Navalni y que permita tipificar lo ocurrido conforme a la legislación penal".
Agregó que la investigación preliminar que se realiza ahora "es una práctica normal en ese tipo de situaciones con pasajeros de avión".
Por su parte, agregó, la Fiscalía General rusa también expresó su disposición de presentar los resultados de los análisis y estudios realizados en Rusia.
El 20 de agosto Navalni se sintió mal durante un vuelo de la ciudad rusa de Tomsk a Moscú, lo que obligó a los pilotos a realizar un aterrizaje de emergencia en Omsk. El opositor fue ingresado en el hospital de Omsk y puesto en coma inducido.
Su portavoz, Kira Yarmysh, que en aquel momento estaba con el opositor, afirmó que los médicos de la ambulancia le dijeron que Navalni sufría una intoxicación, y supuso que habría sido envenenado con alguna sustancia puesta en su té, lo único que había tomado por la mañana en el aeropuerto.
Por su parte, el médico jefe del hospital de Omsk, Alexandr Murajovski, informó que el principal diagnóstico del opositor es un trastorno metabólico provocado por una fuerte caída del nivel de azúcar en la sangre.
El 24 de agosto el hospital Charité informó que los datos del examen clínico apuntan a un envenenamiento con una sustancia del grupo de inhibidores de colinesterasa —enzima vital para el funcionamiento normal del sistema nervioso— aunque el agente concreto todavía queda por determinar.
Los médicos alemanes señalaron que tratan a Navalni con atropina, medicamento que sirve como antídoto para los agentes nerviosos. El hospital Charité afirmó que el opositor sigue en coma, está grave pero su vida no corre peligro.
Por su parte, el vicedirector del departamento de anestesiología y reanimación del Centro médico ruso Pirogov, Borís Teplij, dijo a Sputnik que la versión presentada por los médicos alemanes se analizó por los especialistas rusos al principio pero no se confirmó. Teplij agregó que Navalni recibió atropina desde los primeros minutos de su hospitalización en Omsk.
Los partidarios de Navalni acusan directamente al Kremlin de estar detrás del estado de salud del opositor, algo que Peskov ha negado y tildado de "ruido vacío". A la vez subrayó que no ve motivos para abrir una investigación penal sobre el caso de Navalni.
La Fiscalía de Transporte de Siberia Occidental informó este 27 de agosto que comenzó una investigación preliminar en relación con la hospitalización de Navalni en Omsk. Subrayó que hasta el momento no encontró "sustancias tóxicas ni estupefacientes".