Desde octubre de 2018, Venezuela intenta recuperar 31 toneladas de oro que depositó en el Banco de Inglaterra en el año 2008 y que equivalen a unos 930 millones de euros.
"Ellos dicen: 'nosotros no le queremos entregar el oro al Banco Central de Venezuela porque no reconocemos a Maduro como presidente', pero el problema de ese argumento es que no están diferenciando entre lo que es un Gobierno y lo que es un Estado. El Banco Central de Venezuela, por disposición constitucional es un ente autónomo que tiene toda la facultad de mover los activos venezolanos, el dinero, los bienes y patrimonios del país que estén fuera de sus fronteras. Entonces, independientemente de que ellos tengan un reconocimiento a otro sector político, ese dinero, ese oro no es de Maduro, como lo intentan vender, ese dinero es patrimonio de toda Venezuela, de la nación, del Estado venezolano y, por ende, su obligación no es quedarse con ese oro y retenerlo, sino entregarlo al Banco Central de Venezuela", explica el politólogo y maestrante en historia, William Serafino.
El líder de la oposición venezolana Juan Guaidó ha enviado cartas al Banco de Inglaterra pidiendo retener esos activos porque, según él, Maduro utilizaría ese dinero para pagarle a Gobiernos aliados. Desde Miraflores echan por tierra estas acusaciones y denuncian que el Reino Unido, en complicidad con la oposición venezolana, buscan "despojar" a Venezuela de su oro, como ya lo han hecho a otros países.
"El caso más espectacular y perverso fue el caso de Libia, también el de Irak, donde muchos de los fondos depositados en los bancos ingleses no fueron nunca retribuidos a estos países. Se estima que hay más de 12.000 millones de dólares de fondos libios en los bancos británicos que no han sido devueltos al país", detalla Serafino, quien también es editor jefe del portal de investigación Misión Verdad.
Saqueo al descubierto: en enero 2019 gobierno británico estaba conspirando con Trump en el golpe de Estado. Ofrecieron como contribución ordenar al Banco de Inglaterra robarse el oro del pueblo venezolano.¡Fue un crimen premeditado y con alevosia!
— Samuel Moncada (@SMoncada_VEN) June 19, 2020
¡El mundo debe saber la verdad! pic.twitter.com/JaM8zG2hfl
Según se denuncia desde Caracas, este plan de "despojo" se trazó antes de que Juan Guaidó entrara en el escenario político venezolano con un plan de instalar un Gobierno paralelo, tal como se hizo en Libia, y que provocó el derrocamiento y asesinato de Muamar el Gadafi.
El pasado 14 de mayo, Venezuela demandó al Banco de Inglaterra luego de que esta entidad bancaria se negara a transferir los activos venezolanos al Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo. Un fallo a favor de la oposición sentaría un precedente que le permitiría a Juan Guaidó hacerse con otros activos de Venezuela en el exterior.
Serafino denuncia que Estados Unidos, junto a sus aliados de Occidente, están aplicando un castigo colectivo contra el pueblo venezolano al negarles el acceso a su propio dinero y patrimonio, perseguir y amenazar a quienes muestran voluntad de ayudar a Venezuela con el envío de combustible, al congelar cuentas de empresas mexicanas que harían intercambio de petróleo por alimentos y al embargar activos venezolanos en el exterior, como sucedió en 2018 con Citgo, refinería venezolana en territorio estadounidense.