"Habrá comunidades que puedan entrar en Fase 3, y por lo tanto, en función a los datos de movilidad y de consideración de las comunidades autónomas, se puede establecer una movilidad dentro de una comunidad autónoma o de comunidades que estén dentro de la misma fase", aseguró este 1 de junio el ministro de Transportes y Movilidad, José Luis Ábalos, en declaraciones la televisión pública española.
La intención del Gobierno es que esta sea la última prórroga del estado de alarma, por lo que se introducirán una serie de relajaciones respecto al plan inicial de desescalada.
En un principio, el plan del Gobierno contemplaba mantener el veto a la movilidad entre territorios hasta que se alcanzara lo que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, bautizó como la "nueva normalidad". Es decir, hasta que se completaran todas las fases de la desescalada.
Sin embargo, el anuncio de Ábalos anticipa la posibilidad de que algunos territorios reactiven su movilidad con otros incluso durante la definitiva Fase 3 de desescalada.
Según explicó, el Gobierno espera "que esa movilidad sea posible" si "los datos sanitarios evolucionan en la misma forma que hasta ahora", aunque subrayó que "en todo caso habrá que estar vigilantes".
Actualmente la mayor parte de la población española (el 70%) se encuentra en la Fase 2 de la desescalada, mientras que algunos de los territorios más afectados por la pandemia del COVID-19, como la Comunidad de Madrid, el área metropolitana de Barcelona o casi toda Castilla y León siguen en Fase 1.
Por el momento no se permite la movilidad entre estas islas, pero el anuncio de Ábalos apunta a que se habilitará esta posibilidad a partir del 8 de junio, fecha en la que está prevista la entrada en vigor de la última prórroga del estado de alarma si el Congreso da su visto bueno.
