"La suba del dólar es un poco producto de todas las circunstancias, como el coronavirus o el descenso en los precios del petróleo, a lo que se suma la reestructuración de la deuda", señaló el presidente de la reconocida consultora Orlando Ferreres y Asociados.
En la actualidad, no son rentables los precios a los que se vende el petróleo en Argentina, observó el economista.
Esta medida se adoptó cuando el barril estaba a 60 dólares, pero en la actualidad el precio bajó durante los últimos días a 50 dólares, de modo que no se descarta que se le ponga un precio fijo al crudo para sostener la inversión en zonas estratégicas del país, como en el yacimiento de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén (suroeste).
"Si no hay inversión, empieza a desaparecer la producción, entonces se habla en Neuquén y a nivel nacional de poner un precio mínimo en el petróleo para que eso pueda arreglar el tema del precio congelado de las naftas", señaló Ferreres.
Depreciación
Ante esta situación, Argentina "no puede quedarse atrás, tenemos que seguir al resto de los países en una situación que no es óptima, pero debemos acompañar al resto del mundo con sus tendencias", valoró.
La depreciación de la moneda local argentina será más suave que la de Brasil, que es un actor más influyente en los mercados internacionales.
Coronavirus
En cuanto a la propagación del coronavirus, el titular de la consultora observó que en el país de momento sólo hay 31 casos confirmados, entre los que se registró un fallecimiento, pero que en todo caso, "no es situación de súper emergencia".
"Las autoridades no han desestimado los derechos de la exportación de la soja al subir la alícuota, entonces tratan de exportar ese producto de Argentina que se vende mucho en el mundo, y cuyo precio no bajó mayormente todo lo que podía", puntualizó.
En cuanto al impacto que puede tener en el índice de precios al consumidor (ipc) la depreciación de la moneda local respecto al dólar, el titular de la consultora Ferreres y Asociados no descartó nuevos aumentos.
En la primera semana del mes de marzo, los precios de bienes y servicios subieron 3,5% en relación a febrero, de acuerdo a las estimaciones de la institución que dirige.
Desde su consultora estiman que durante el resto del mes la inflación "va a ir aflojando y estará más abajo, porque por ejemplo, en la parte alimentos no notamos una diferencia notoria", indicó.
Riesgo país
El riesgo país, en tanto, aumentó sólo este jueves 5,8% y superó los 3.100 puntos, un pico que no se registraba desde junio de 2005.
La subida exponencial del indicador del J.P Morgan, que en el transcurso de este mes registra un alza de 38,8%, "muestra una situación difícil frente a la resolución de la deuda externa".
"Hasta ahora los fondos buitre, los que invierten para después hacerle juicio al país, no han comprado bonos de Argentina, pero sí lo han hecho los que compran para hacer diferencias de precio, entonces puede ser que se necesite una oferta exigente", evaluó el economista.
Deuda
El mercado también está atento a la propuesta que el Ministerio de Economía para reestructurar los bonos bajo legislación extranjera por valor de 68.842 millones de dólares que tienen en sus manos los acreedores externos.
La cartera económica que conduce Martín Guzmán "hará pronto una propuesta en base a lo que dicen los bancos asesores (contratados por el Gobierno) como The Bank of América o HSBC, y principalmente la banca de inversión francesa Lazard", explicó.
Ante esta situación, Ferreres consideró que la negociación que llevará adelante el Gobierno argentino será exitosa.
"Creemos que la operación debe estar bien asesorada por los bancos asesores, así que esperamos que va a ir bien y que puede ser exitosa en un plazo que no sabemos cuál será porque están en plenas conversaciones".
El país sudamericano, de hecho, mantiene una deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI) de 44.000 millones de dólares que fue suscrita durante la administración anterior del expresidente Mauricio Macri (2015-2019).
El Gobierno argentino espera reperfilar la deuda pública externa que se encuentra en manos de acreedores extranjeros, entre ellas la del FMI y la del Club de París, pero advirtió que el país debe crecer antes de cumplir con sus compromisos financieros.