"No se descarta esa posibilidad, el ministro de Energía, [Alexandr] Nóvak, ya habló sobre ese asunto", dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en una comparecencia ante la prensa.
El 6 de marzo, la OPEP y 10 productores independientes, entre ellos Rusia, pusieron fin a los recortes petroleros a partir del 1 de abril al no lograr consensuar una prórroga de la iniciativa que estaba vigente desde principios de 2017.
El 8 de marzo algunos medios afirmaron que Arabia Saudí planeaba aumentar la producción hasta 12 millones de barriles diarios en abril. El 9 de marzo la cotización del crudo Brent se hundía hasta 31,43 dólares el barril, el petróleo estadounidense WTI se desplomó a 29,73 dólares el barril.
"La economía rusa posee la fortaleza necesaria para superar esta inestabilidad temporal", enfatizó.
El alto funcionario recordó que la caída de la demanda de petróleo ya se había registrado antes en los mercados.
"Son datos objetivos y es que ya se había pronosticado ese escenario y esa volatilidad", apuntó.
Peskov indicó que los responsables del sector y las compañías petroleras del país estudiaron distintos escenarios ante la volatilidad que se prolongará cierto tiempo.
"Efectivamente, antes de la reunión de la OPEP en Viena, se debatieron distintas variantes (...) Los ejecutivos del sector petrolero y los responsables de los departamentos expresaron varios puntos de vista y posibles escenarios", puntualizó.
El portavoz del Kremlin agregó que el presidente Putin de momento no tiene planeado reunirse con los representantes de las compañías petroleras del país.
