Anunciado a comienzos de enero, el complejo Central Park Lagunas de Tulum construirá la primera torre de aterrizaje de drones no tripulados de México. Fundada por dos alemanes, Nicolai Wilmes y Marc Levy, "Los amigos" se presentan como "la desarrolladora que quiere poner verde a Tulum" y es famosa por su inversión en tecnologías limpias.
Sin embargo, convertir Tulum en un destino amigable con el medioambiente acrecentó la desigualdad entre los locales y los extranjeros de manera abismal: ha aumentado las rentas al nivel de la capital mexicana (pagando un mínimo de 500 dólares al mes por viviendas sencillas). Al mismo tiempo se desató una ola de muertes que convirtió a Tulum en el municipio más violento de México en 2019 con 133 ejecuciones cada 100.000 habitantes, superando el histórico promedio de Tijuana (en la frontera norte) que registró 90 muertes violentas cada 100.000 habitantes en el mismo período.
"La de Tulum es una gentrificación violenta", dijo a Sputnik el periodista Héctor Valdez, director del portal Tulum en la red, que reporta noticias de este pequeño municipio de apenas 32.000 habitantes y sus comunidades aledañas, cuyos ojos expertos explicaron a este medio los orígenes del proceso que dejó al paraíso con una de las tasas de asesinatos más alta del mundo.
Turismo sangriento
Alrededor de las 03:00 de la madrugada de este viernes 31 de enero de 2020, Luis Alfredo Flores Manzanilla, dirigente político local afiliado al Partido del Trabajo (PT) fue asesinado por sicarios en una zona en disputa conocida como 2 de octubre, próxima al exclusivo fraccionamiento privado llamado Aldea Zama.
"El anterior Gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, vendió muchos terrenos por todo el Estado a precios ridículos a su familia y allegados. Hablamos de que vendieron a 16 pesos mexicanos el metro cuadrado (0.85 dólares)", explicó Valdez.
Valdez relató que con apoyo político "todo el mundo quería invadir" y esto sucedió en al menos cinco puntos distintos del pequeño Tulum, en el que participaron más de 6.000 personas. Esto demostró la extendida necesidad de vivienda en un sitio donde la población originaria alquila y no es propietaria y permitió que en esa precariedad "se aprovecharan todo tipo de personas", señaló el reportero.
"Estas inversiones fueron fomentadas por el mismo Gobierno de Quintana Roo, pero desde hace un año (2018-2019) quiere que otras personas se queden con esos terrenos. Ya han sacado a más de 100 familias, pero quieren seguir sacando. Han atacado a algunos líderes que se han enfrentado a los desalojos, como lo hizo Flores Manzanilla, a quien acaban de matar", explicó.
Aldea Zama es otro de estos proyectos inmobiliarios exclusivos, que está al lado de la zona de invasiones, donde fue asesinado Flores Manzanilla. "Por eso es tan cara y tan interesante esa zona de invasiones, está colindante al desarrollo de más alto nivel de Tulum, que fue construido en un terreno que originalmente era propiedad de la Universidad de Quintana Roo. Los Amigos están en otra zona, pero que es cercana. Hay intereses enormes en los costos de los terrenos", explicó.
Según relató Wilmes, CEO de Los Amigos a Expansión su inversión inicial en Tulum fue en el año 2008, en la que compraron 4.500 metros cuadrados por 30.000 dólares. Es decir, según el precio del dólar de ese año (3,47 pesos mexicanos por dólar) los alemanes pagaron poco más de seis dólares el metro cuadrado en la zona más cara de la Riviera maya, alrededor de 20 pesos mexicanos por metro cuadrado.
¿Tiene que ver esta masiva llegada de capital a Tulum con el aumento de la violencia?
"Sin ningún lugar a dudas. Son varios los factores que aumentan la violencia en la zona de las invasiones: que grupos criminales que se asentaron al interior de las invasiones y que hay intereses económicos muy fuertes sobre los terrenos ocupados", señaló Valdez.
El periodista con décadas de experiencia en esta antigua zona tranquila, señaló que "los invasores" son familias pobres y que han manifestado su voluntad de quedarse con esos terrenos y pagarlos a precios bajos. "Pero al Gobierno no le interesa darle esos predios a ese precio a esas personas sino promover desarrollos inmobiliarios ahí, donde hay gente muy interesada ya", explicó.
Existe otro 'beneficio' privativo para los desarrolladores extranjeros, que no reciben los vecinos originarios: avanzar sobre tierras vírgenes que estaban protegidas o que eran propiedad del Gobierno Federal, gracias a cambios del uso de suelo para volverlas aptas para transformarse en ciudad.
"Hay un manejo muy irregular de la forma en que se construye, que no respeta la densidad de población baja que permite Tulum", señaló la fuente, quien indicó que el actual Ejecutivo estatal autorizó varios cambios de uso de suelo en noviembre y diciembre de 2019.
"El suelo que originalmente se tenía como reserva se cambió para uso residencial, permitiendo una densidad de población altísima para la zona. Los desarrollos violan la densidad de población que está en la ley cuando construyen edificios sin control", explicó.
"No se respeta la vocación ecológica que tenía el terreno originalmente, ni se respeta la irregular densidad que le otorgó el municipio actual, que ya es muy alta, pero la hacen todavía más alta. En algunos lugares hacen esto sin que se entere nadie: de pronto aparece un desarrollo irregular construido, que arreglan después con las autoridades", explicó Valdez.
Esta lógica de los hechos consumados, se completa con fuertes campañas publicitarias para "limpiar" su imagen pública y vender a la población y a la opinión pública que sus desarrollos son "una maravilla".
Esta situación ha tomado tal gravedad, que en cinco años se cerraron todos los accesos públicos a las playas de Tulum. El último en cerrarse fue el de Akumal, que enfrentó una fuerte oposición de los vecinos al avance privatizador a mediados de 2016, contra un desarrollo llamado Centro Ecológico Akumal.
"En la zona de Tulum habitaba el mayor número de grandes felinos de la Península de Yucatán. Ahora no se sabe cuántos sobreviven, pero a comienzos de enero, uno de estos empresarios publicó una foto con la leyenda 'el gatito tiene hambre' que mostraba como una jaguar hembra embarazada estaba comiendo de la basura de uno de estos desarrollos inmobiliarios más exclusivos de Tulum", concluyó.