Con el traspaso de responsabilidades, el proceso queda a cargo del Senado, donde los republicanos son mayoría y sale de la jurisdicción de la Cámara de Representantes, donde los demócratas dominan.
Los acontecimientos, en medio de una campaña electoral en la que Trump busca reelegirse, será una prueba no sólo de su presidencia, sino del equilibrio de poderes entre las tres ramas del Gobierno. Varios senadores están compitiendo para ser el candidato presidencial demócrata y enfrentar a Trump en las elecciones de noviembre.
Trump califica el proceso de "una farsa", a pesar del surgimiento de nuevas pruebas de que presionó al Gobierno de Ucrania para que investigue a sus rivales políticos al tiempo que le retenía asistencia financiera ya aprobada por el Congreso.
Pelosi señaló que usualmente ese tipo de hechos serían investigados por un fiscal especial, pero dudó que eso ocurra ahora. "Esto es un ejemplo de lo que hacen los secuaces del presidente y espero que los senadores no se conviertan en los secuaces del presidente", expresó Pelosi.
Trump está acusado de abuso de poder al presionar a Ucrania a que investigara al demócrata Joe Biden, exvicepresidente y posible contrincante de Trump en las elecciones de noviembre próximo, mientras le retenía la ayuda financiera al país europeo. Además, Trump está acusado de obstruir las labores del Congreso, ya que se negó a cooperar con la pesquisa, impidiendo la entrega de documentos o la presentación de testigos.
El 19 de diciembre, la Cámara de Representantes votó a favor destituir a Trump por abuso de poder y obstrucción del Congreso por supuestamente congelar ayuda militar con el fin de presionar a Ucrania para investigar a su rival político Joe Biden.
Trump negó en reiteradas ocasiones haber actuado mal, rechazando repetidamente la investigación de juicio político y calificándola de "caza de brujas".