En el Parque Nacional Cabo Polonio, ubicado en el departamento de Rocha, no hay luz eléctrica ni agua corriente, no hay calles ni autos sino senderos irregulares y la única forma de ingresar es a pie, caballo o con vehículos todo terreno.
"Es un lugar con un encanto bien particular. Es parte de la Red de Áreas Protegidas del Uruguay y ya desde el ingreso empieza la aventura. Hay que parar en la ruta 10, dejar el auto y comenzar desprenderse de las comodidades. La única luz que hay es la del Faro", contó Ana Claudia Caram, directora de turismo de Rocha.
Se trata de un cabo que se adentra en el mar y cuenta con dos playas: la sur y la norte. La primera es más abierta, fría y cristalina; la segunda, llamada Playa de la Calavera, tiene como marco el Cerro Buena Vista, ubicado en el balneario Barra de Valizas.
Fue hace muy poco, recién en la década de los 90, que este lugar empezó a ser visitado por pescadores de tiburones y por quienes se dedicaban a la faena de lobos marinos. No fue hasta principios de los 2000 cuando comenzó su auge turístico.
"Todos los turistas que vienen a Rocha pasan por Cabo Polonio. Algunos lo visitan a diario y otros optan por quedarse. Recomiendo pasar al menos una noche para contemplar el cielo estrellado, salir a los pubs y restaurantes con velas prendidas y escuchar música en vivo de artistas locales", concluyó Caram.