El 2019 cerró con 50.000 barriles de producción y más de 2.600 millones de dólares de inversión en la industria, mientras que el 2020 va a mostrar resultados aún mejores, cita el periódico El Economista. El incremento se deberá principalmente al desarrollo de los yacimientos existentes y a la unificación de otros.
La posible unificación de Zama
Además, el yacimiento de Zama, uno de los campos petroleros más ricos descubiertos en México en los últimos años, podría ser unificado. Se trata de un campo con un potencial de más de 1.000 millones de barriles.
Como parte del proceso de unificación, el consorcio operador que consta de Talos, Sierra Oil and Gas y Premier Oil ha perforado tres pozos más para terminar la evaluación del área. Ahora, se espera que Pemex —la principal empresa estatal de petróleo y gas natural de México— perfore el pozo Asab-1 a inicios del 2020.
Más pozos por venir
En el 2020 se podrían perforar, por lo menos, 34 pozos exploratorios y otros 91 en desarrollo, varios de los cuales se van a encontrar en aguas profundas del golfo de México, unas zonas difíciles de trabajar.
De momento, hay 111 contratos petroleros vigentes en el país, de los cuales 29 están en la etapa de producción. El resto está en la de exploración. El sector privado planea producir 280.000 barriles diarios de crudo para el 2024.