La conferencia de los países miembros de la OPAQ estudió dos propuestas sobre la ampliación de la lista:
- la primera fue presentada por Estados Unidos, Canadá y Países Bajos;
- y la segunda, por Rusia.
La delegación rusa sostiene que los resultados de la votación no significan que esas clases de químicos se incluyan en la lista, sino que solamente se pondrá en marcha un procedimiento en el marco del cual los especialistas técnicos estudiarán esa posible ampliación.
A principios de marzo pasado Serguéi Skripal, exoficial de la inteligencia militar rusa reclutado en los años 90 por el servicio secreto británico MI6 y naturalizado en el Reino Unido, y su hija Yulia, fueron hallados inconscientes cerca de un centro comercial en la ciudad británica de Salisbury, como resultado de lo que Londres llegó a calificar como intento de envenenamiento con una sustancia neuroparalizante.
Después de recibir el alta médica, los dos fueron trasladados a un lugar secreto.
También fue dado de alta el detective que se expuso a la sustancia de acción neuroparalizante al investigar lo ocurrido en Salisbury.
Nada más abierta la investigación, Londres responsabilizó a Moscú de estar detrás del envenenamiento y catalogó el arma como neuroparalizante de la clase Novichok, supuestamente desarrollada por químicos rusos.
Moscú rechaza de plano las acusaciones de Londres, que considera infundadas, y envió decenas notas diplomáticas al Foreign Office reclamando acceso a las pruebas para poder colaborar con la investigación, así como a los Skripal que son ciudadanos de Rusia.
A raíz del caso de Salisbury, los dos Estados redujeron en grado considerable sus contactos diplomáticos.