"Hay conflictos, hay puntos críticos en el Chapare (centro) y en El Alto, que nos están impidiendo un abastecimiento normal", reconoció en su primera aparición ante la prensa el nuevo ministro de Hidrocarburos, Víctor Hugo Zamora, quien juró al cargo en la noche del 14 de noviembre.
El aún incompleto gabinete de la presidenta de facto Jeanine Áñez ha resultado forzado a atender los conflictos persistentes en vez de poner en marcha el proceso de transición democrática, con nuevas elecciones, señalado repetidamente por la líder opositora como objetivo principal de su gestión.
En las estaciones de servicio, donde había largas filas de automovilistas, la venta de gasolina estaba limitada a unos 14 litros por vehículo, constató Sputnik.
En los mercados tradicionales, donde la mayoría de la población se aprovisiona de productos agrícolas a granel, la escasez devino en una ola de especulación, facilitada aparentemente por la ausencia de control municipal.
"Mis proveedores de pan dicen que no va a haber harina y que también se cortará el gas, por eso han traído poco pan, y más caro", dijo a Sputnik la dueña de una pequeña tienda, que se identificó solo como Rosa, al justificar que cada pan de hasta 55 gramos, que se vendía en 50 centavos de boliviano (7 centavos de dólar), cuesta ahora 60 centavos, un alza de 20%.
Medios locales reportaron también gran escasez en los mercados de Cochabamba (centro) y Santa Cruz (este).
La Cámara Nacional de Industrias reportó que la falta de gas natural golpeaba especialmente a las industrias de bebidas gaseosas, lácteos, cerveza y cemento.
La petrolera estatal YPFB informó que ante la escasez de gas natural estaba dando prioridad a los usuarios domésticos.