"Para el presente año se tiene programada la construcción de 6.016 viviendas bioclimáticas en 38 provincias de nueve departamentos del (sur del) país con una inversión de 175 millones de soles (53 millones de dólares)", dijo el Ministerio de Vivienda en un comunicado.
La llamada Operación Abrigo empezó con una primera etapa de construcción de 3.600 viviendas en la región de Puno, la más castigada con las bajas temperaturas durante el invierno austral.
Las temperaturas en zonas por encima de los 4.000 metros sobre el nivel del mar pueden llegar hasta 37 grados bajo cero en tiempo de heladas, según datos del Instituto Nacional de Defensa Civil.
El año pasado, las heladas ocasionaron la muerte de más de 700 personas, la mayoría por complicaciones respiratorias, indica el Ministerio de Salud.
La vivienda bioclimática (Sumaq Wasi o "casa bonita" en quechua) cuenta con ventanas con doble vidrio en el techo que permiten el ingreso del calor solar durante el día.
Todas las ventanas son dobles y las puertas se fabrican de material térmico; los muros son de adobe, con refuerzos de caña y enlucido de yeso, y los pisos de las habitaciones son de madera; el diseño contempla un espacio entre una primera puerta de acceso y una segunda para minimizar el ingreso de aire frío.
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Esta técnica asegura aislamiento térmico y absorción del calor del sol durante el día para mantener la casa templada durante las gélidas noches, según el Ministerio de Vivienda.
La Operación Abrigo apunta a que las poblaciones "altoandinas", que viven en altitudes por encima de los 3.500 metros sobre el nivel del mar, reduzcan las "posibilidades de adquirir enfermedades de índole respiratorio, presenten afectaciones a la salud en general o que mueran por las bajas temperaturas", indicó la cartera.
Se trata de poblaciones en extrema pobreza, dedicadas mayormente a actividades de pequeña ganadería de auquénidos, como llamas y vicuñas.