Las solicitudes para la compra de este petróleo podrán hacerse hasta el 13 de marzo, y los envíos se realizarán entre abril y mayo. Para Maxim Rubchenko, columnista de la versión rusa de Sputnik, esas fechas no se han escogido por escoger, ya que es precisamente a principios de mayo cuando finaliza la tregua de sanciones de EEUU contra Irán.
"En noviembre EEUU anunció el embargo del petróleo iraní. A los países que siguen comerciando con Teherán se les amenazó con sanciones secundarias desde Washington. Pero algunos de sus principales socios —China, la India, Italia, Grecia, Japón, Corea del Sur, Taiwán y Turquía—obtuvieron excepciones a las sanciones hasta el 4 de mayo. Pasada esa fecha, según el plan de Washington las exportaciones iraníes deberían reducirse a cero", señala Rubchenko.
Sin embargo, las exportaciones de petróleo iraní no desaparecerán pasado el 4 de mayo, dice. Y gran parte de la culpa la tiene precisamente Estados Unidos, asegura.
Te puede interesar: Irán tiene nuevos potenciales compradores de petróleo pese a las sanciones de EEUU
En marzo Trump dijo en el Congreso que planeaba retirarles el trato comercial preferencial a Turquía y a la India. Trump lo justificó diciendo que durante los 45 años que Turquía se había beneficiado del programa la economía del país y los ingresos de su población habían aumentado, que el nivel de pobreza se había reducido y que las exportaciones se habían diversificado. "Y a la India se la quiere quitar por no haber permitido a las empresas norteamericanas acceso al mercado interior indio", explica.
Por lo tanto, aunque las exportaciones iraníes disminuyan en mayo, el movimiento no será significativo. Esto significa que tras la venta de petróleo estadounidense habrá un exceso de oferta en el mercado y que el barril de Brent podría pasar a costar 50 dólares en lugar de los 65-67 dólares de hoy, según los expertos.
Tema relacionado: Irán advierte que demanda global de petróleo no será satisfecha pese a medidas de EEUU
"Lo más relevante de la situación es que cuanto más dure la política de Trump, más problemas tendrá Estados Unidos. Si los precios del petróleo descienden, se agravará la crisis de la industria estadounidense de la pizarra", explica el experto en su artículo.
En otras palabras, si Irán decide cerrar el estrecho, el precio del petróleo se disparará. Y a Trump eso no le va a gustar, señala Rubchenko.
Te puede interesar: Las sanciones de EEUU contra Irán, bajo la lupa