El traslado de la Embajada de Brasil en Israel de Tel Aviv a Jerusalén es una de las promesas de campaña de Bolsonaro. Tras una reunión con el presidente de Brasil en los primeros días del año, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu llegó incluso a afirmar que lo único que faltaba para llevar a cabo la decisión era cuadrar una fecha.
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Sin embargo, tras una reunión con Ibrahim Alzeben, el embajador de Palestina en Brasil, Mourao afirmó que "por ahora" no se llevará a cabo el traslado de la Embajada.
Sin embargo, Mourao resaltó que la decisión final le corresponde a Bolsonaro.
Para David Magalhaes, profesor de Relaciones Internacionales de la Pontificia Universidad Católica de Sao Paulo (PUC-SP), el retroceso demuestra una disputa dentro del Gobierno del país.
"Lo que vemos hoy en el Gobierno de Bolsonaro es la disputa de un ala pragmática, que son los militares, con una ideológica, que es el movimiento antiglobalista", detalló.
Según Magalhaes, Mourao no mantiene buenas relaciones con el ministro de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo, y tiene preferencia por una figura "económicamente más liberal" para ocupar la Cancillería de Brasil. Mourao, incluso, ya ha criticado al canciller públicamente en una entrevista para la revista Época.
Según el profesor, Brasil apoya la propuesta "al menos" desde el Gobierno de Costa e Silva, en 1967. Romper esa tradición tendría graves efectos colaterales, como el posible cierre del importante mercado árabe para las exportaciones de carne brasileña.
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