Según Grenel, la posible imposición de sanciones por parte de EEUU a las empresas alemanas que participan en el proyecto Nord Stream 2 podría producirse a raíz de la presunta preocupación de Washington por la independencia energética de Europa y por el tránsito de gas ruso a través de Ucrania.
"Las empresas que participan en los proyectos energéticos de Rusia corren el riesgo de ser sometidas a duras sanciones", declaró el embajador sin precisar de qué tipo de medidas se trata.
Grenel destacó que la construcción del gasoducto Nord Stream 2 tiene como objetivo crear una ruta alternativa para el tránsito de gas ruso hacia Europa que evite el territorio de Ucrania.
El diplomático opina que el tránsito de gas a través de Ucrania será prácticamente innecesario una vez que se realice este proyecto y el del gasoducto Turk Stream. Además, declaró que la existencia del gasoducto influirá no solo en Alemania sino en toda Europa.