Según datos de la Cámara Alta, de cada cuatro senadores que intentaron la reelección, tres no lo consiguieron; "de las 54 plazas que estaban en disputa este años, 46 serán ocupadas por nuevos nombres, más del 85% de renovación".
En las elecciones de 2022, estarán en disputa las 27 plazas del tercio restante.
Igual que en la Cámara de Diputados, la fragmentación será dominante: habrá 21 partidos diferentes, seis más que en el resultado de las elecciones de 2010.
Este año, el partido que ganó más escaños fue el oficialista Movimiento Democrático de Brasil (MDB), el partido del presidente Michel Temer, que consiguió siete senadores.
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La formación del candidato de la ultraderecha Jair Bolsonaro, el Partido Social Liberal (PSL), que hasta ahora no tenía representación en el Senado, consiguió cuatro senadores, representando estados de la región sureste y centro-oeste del país.
El Partido de los Trabajadores (PT) de Fernando Haddad consiguió seis, todos ellos del norte y noreste, la región más pobre y tradicionalmente donde más se vota a la formación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011).