El magistrado Edward Chen, del Distrito Norte de California, emitió el 3 de octubre una resolución provisional que obliga al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) a mantener el programa alegando que su terminación derivaría en "daños irreparables y grandes penurias" para los beneficiarios y sus familias.
"Estos problemas son cuando menos lo suficientemente graves como para preservar el statu quo", apuntó.
El portavoz del Departamento de Justicia, Devin O'Malley, criticó la decisión del juez al afirmar que "usurpa la función del poder ejecutivo".
"El Departamento de Justicia rechaza completamente la idea de que la Casa Blanca o el Departamento de Seguridad Nacional hicieron algo indebido. Seguiremos luchando por la integridad de nuestras leyes de inmigración y nuestra seguridad nacional", subrayó.
Las autoridades estadounidenses pueden incluir a ciudadanos extranjeros en el TPS si la situación en su país de origen no les permite regresar de manera segura, por ejemplo en caso de conflictos armados, desastres naturales y epidemias, según el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EEUU.
Según trascendió a la prensa a principios de este año, el presidente de EEUU, Donald Trump, habría utilizado expresiones despectivas en relación con inmigrantes de Haití, El Salvador y países de África.
Más: El hambre empuja hacia EEUU a migrantes de El Salvador, Honduras y Guatemala
Fuentes informadas sobre el encuentro dicen que Trump preguntó "por qué tenemos a toda esa gente de países (que son un) agujero de mierda viniendo aquí", dando a entender que preferiría a inmigrantes provenientes de Noruega. Más tarde, el propio Trump afirmó en su cuenta de Twitter que no había dicho nada despectivo sobre los haitianos.
No te lo pierdas: El año en el que se debilitaron los derechos de los migrantes en América