"Son bastante probables las provocaciones de los adversarios de Damasco, que esperan apoyo militar de los patrocinadores extranjeros, tenemos pruebas irrefutables de estas preparaciones", dijo.
Por su parte, Ammar Yamal, activista de derechos humanos, dijo a Sputnik que un grupo de 30 integrantes de la polémica organización Cascos Blancos llegaron a Idlib desde Turquía para preparar el montaje.
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El 8 de septiembre el Ministerio de Defensa ruso denunció que los terroristas acordaron un plan para escenificar ataques químicos en cuatro localidades de Siria, ubicadas en la gobernación de Idlib.
El portavoz del ente, Ígor Konashénkov, advirtió antes que la coalición encabezada por EEUU utilizaría ese "montaje" como pretexto para atacar las instalaciones del Estado sirio.
