El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton, reiteró la disposición de Washington de atacar al Ejército sirio si emplea armas químicas durante sus operaciones militares en la provincia de Idlib.
El guion actual coincide con lo ocurrido en abril pasado, cuando EEUU, Francia y el Reino Unido atacaron Siria como 'respuesta' por el presunto ataque químico llevado a cabo en la localidad de Duma, Guta Oriental, sin que una investigación internacional de lo ocurrido hubiera empezado.
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El medio ruso Svobodnaya Pressa analizó los riesgos que ofrece la promesa de Bolton si algún grupo en Idlib decide aprovecharla para sus intereses.
Una gran parte de Idlib es controlada por el grupo Hayat Tahrir al Sham, conocido anteriormente como el grupo terrorista Frente al Nusra (proscrito en Rusia). El mayor peligro radica en que este grupo no se limita al usar los métodos más crueles e inhumanos en la guerra, desde secuestros masivos hasta ejecuciones públicas de sus oponentes.
El supuesto uso de armas químicas en Duma —desmentido tanto por los testigos como por periodistas e investigadores—, que conllevó a un ataque apresurado de los países occidentales contra Siria, fue su obra, recuerda el medio.
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Los objetivos de la falsificación
El riesgo de que falsifiquen un ataque con armas químicas persiste y su objetivo, como mínimo, sería aplazar la ofensiva siria en Idlib, comentó a Svobodnaya Pressa el experto militar ruso Alexéi Leonkov.
"Los territorios kurdos y la provincia de Idlib son las dos últimas regiones en Siria con valor para los estadounidenses (…), así que EEUU va a continuar luchando por su influencia. En Idlib, los Cascos Blancos pueden 'ayudar' a Washington", opinó Leonkov.
Con una nueva falsificación se buscaría culpar al presidente sirio, Bashar Asad, así como a Rusia e Irán como sus aliados, sostuvo Leonkov al añadir que "el objetivo final sería obtener un pretexto para usar la fuerza contra Asad".
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"Idlib es una región muy problemática. De ser controlada por EEUU podría causar daños tanto a Siria como a Turquía. Ambos quieren solucionar este problema, pero difieren en sus métodos. Y están los Cascos Blancos con sus posibles provocaciones", enumeró el experto.
A su vez, Rusia ya ha exhortado a rechazar la política destructiva de aquellos países occidentales que buscan utilizar el tema de las armas químicas para alcanzar sus objetivos geopolíticos.
