"Se trata de una zarigüeya prehistórica que vivió en Sudamérica en la edad Chapadmalense", contó a Sputnik el paleontólogo argentino Matías Taglioretti, del Museo de Ciencias Naturales de Mar del Plata "Lorenzo Scaglia".
El esqueleto de este peculiar marsupial sudamericano cuyo nombre científico es Thylatheridium cristatum, fue hallado "casi completo" y está "totalmente articulado".
En el vídeo se utiliza el término comadreja, aunque según el paleontólogo este nombre fue importado de Europa y en realidad hace referencia a otro grupo de animales, así se popularizó en Sudamérica porque era lo más parecido a lo que existía en el viejo continente.
"Pero en realidad el nombre más ajustado y que más lo describe sería la zarigüeya", aclaró Taglioretti.
"Este hallazgo nos ofrece la oportunidad de comparar las zarigüeyas extintas hace tres millones de años con las actuales y establecer relaciones filogenéticas: vamos a poder precisar con exactitud cómo fueron las secuencias de cambios morfológicos de los didélfidos con lujo de detalles", precisó Taglioretti.
"El tamaño de la zarigüeya antigua es muy similar a las actuales, en ese sentido no esperamos encontrar muchas diferencias pero sí algunas que nos permitan establecer en qué momento los grupos de marsupiales modernos se originaron y empezaron a dominar algunos nichos ecológicos dentro de Sudamérica", indicó.
No obstante, es la primera vez que científicos sudamericanos encuentran un esqueleto completo para analizar hipótesis filogenéticas y evolutivas de este grupo de marsupiales didélfidos y para encausarlos en el registro fósil.
Mar del Plata tiene una riqueza paleontológica muy amplia, hay una gran cantidad de restos fósiles y en este caso el hallazgo fue producto del trabajo que hace años vienen realizando en la zona un grupo de paleontólogos del Museo Scaglia.
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"Siempre desde el Museo organizamos prospecciones paleontológicas de rutina y junto al paleontólogo italiano Alberto Boscaín logramos extraer estos restos completos", comentó el científico.
En las barrancas de Mar del Plata el tiempo de trabajo está determinado por las mareas, pues el mar sube y baja cada seis horas y solo deja una pequeña ventana de tiempo para la excavación.
