No obstante, por ahora no se dan las condiciones favorables para que la empresa rusa haga un descuento, opinan los expertos entrevistados por la cadena rusa RT.
El experto del Fondo de Seguridad Energética Nacional de Rusia Ígor Yushkov opina que esta es una situación normal.
"En cada contrato de Gazprom hay un punto que dice que cada dos o tres años las partes tienen derecho a demandar que se reconsidere la tarificación. No hay nada extraordinario en eso. Todos los años anteriores al desplome de los precios del petróleo y el gas Gazprom afrontó momentos en los que los consumidores apelaban a los juzgados o le pedían directamente que les bajara los precios", explicó Yushkov a RT.
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No obstante, el analista considera que las posiciones de PGNiG en el posible litigio judicial con Gazprom serán débiles ya que los precios del gas —que estaban estrechamente vinculados con los del petróleo— ya se desplomaron entre 2014 y 2015.
"Por esta misma razón es completamente incomprensible a qué apela la empresa polaca en sus demandas", enfatizó.
Por si fuera poco, Yushkov considera que es Gazprom el que tiene todo el derecho de demandar que la empresa polaca le compense las pérdidas. Según el experto, Polonia consigue gas ruso por debajo del precio de mercado.
"En el mercado al contado —mercado en el que se venden bienes con dinero al contado y a precios de mercado para ser suministrados al comprador en plazos cortos— los precios del gas superan a los de Gazprom, por eso la gran pregunta es si puede o no la empresa polaca demostrar que es necesario que bajen las tarifas. Pienso que en esta situación es Gazprom quien tiene que apelar al juzgado para demostrar que su precio es más bajo que el del mercado", destacó el experto, a la vez que agregó que la actual decisión del Instituto de Arbitraje de la Cámara de Comercio de Estocolmo no obliga a nada a Gazprom.
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En PGNiG han reiterado que la empresa está tratando de diversificar su negocio. Polonia pone sus mayores esperanzas en la construcción del gasoducto Baltic Pipe, que le ayudará a importar combustible desde Dinamarca. Si bien la construcción de esta tubería todavía no ha empezado, en Varsovia planean que el proyecto esté operativo en 2022. El contrato de Yamal vence precisamente ese mismo año.
"La extracción de gas va a la baja en los países europeos. No hay nuevos yacimientos, mientras que los viejos están bastante agotados. En cuanto a Dinamarca, no hay absolutamente ninguna posibilidad de que este país pueda sustituir a Rusia en el mercado polaco, ni siquiera en el plano teórico. Es una pura fantasía", explicó Tankaev a RT.
El interlocutor de la cadena subrayó que Rusia es la única capaz de garantizar que los suministros baratos de hidrocarburos continúen llegando a Polonia.
"Por eso [en Varsovia] deben tratarnos de manera distinta y sin hacer caso a las declaraciones que vienen desde EEUU y la Comisión Europea. Deben tratarnos como la principal esperanza para garantizarles el abastecimiento energético y no como un regulador que pueda presionar a la industria europea", aseguró el experto.
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No obstante, en PGNiG tienen otro punto de vista. La empresa polaca incluso cerró un contrato con Centrica según el cual la compañía británica suministraría combustible a Polonia desde el terminal Sabine Pass, situado en la frontera del estado de Luisiana (EEUU).
"Ellos compran pequeños volúmenes de gas a EEUU, pero cuentan a todos que es el mismísimo país norteamericano el que los abastece con gas. Además, Polonia está tratando de alcanzar un acuerdo con Ucrania para que esta adquiera a Varsovia una parte de este gas. Todo eso permite a Polonia aplicar una política energética muy estridente en la UE", recalcó Frolov.
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Polonia, junto a Ucrania y EEUU, forma parte del grupo de principales adversarios de la construcción del gasoducto Nord Stream 2. El proyecto Nord Stream 2 prevé la construcción de dos tuberías de gas con capacidad para 55.000 millones de metros cúbicos anuales desde la costa rusa hasta Alemania —a través del fondo del mar Báltico—. El gasoducto deberá cruzar las zonas económicas de Alemania, Dinamarca, Finlandia, Rusia y Suecia.